Con la llegada del buen tiempo, el vestido blanco se convierte en ese básico de fondo de armario al que recurrir cuando no sabemos muy bien qué ponernos. Y es que hay pocas prendas más versátiles y favorecedoras, un aliado para los meses de calor capaz de encajar tanto en un plan de día con un sombrero, bolso de rafia y sandalia plana, como en un evento más especial si lo combinas con alpargatas de cuña, al más puro estilo de la reina Letizia.
Independientemente de su silueta, corte o longitud, la clave de los vestidos blancos es que son capaces de crear look impecables en tiempo récord, y con los accesorios y el calzado correcto lo reinterpretarás tantas veces como quieras.
Vestidos blancos los hay para todos los gustos y las tiendas están inundadas de opciones: de corte midi, camisero, de punto, con escote en la espalda… Sea cual sea tu elección, si combinas tu vestido con alpargatas o sandalias planas elevarás tu look a lo más alto.
Vestido blanco y largo, el clásico ibicenco
Al hablar de vestidos blancos es imposible no pensar en la diseñadora Charo Ruiz y su colección ibicenca. En concreto, en este modelo con cuerpo ajustado, favorecedor escote en V y falda en forma de A con sugerente abertura decorada con guipures verticales. El juego que hace de entredoses en cintura y falda crea una sutil transparencia con un acabado romántico que tiene un precio de 589 €.
Vestido de punto calado con escote en la espalda
Desde hace un año, el vestido de punto es un básico de fondo de armario capaz de realzar todas y cada una de nuestras curvas. Este diseño se Bershka es pura sensualidad con un acabado semitransparente y escote en la espalda. Ideal para la ciudad, para una cena con amigas o una tarde de compras, y perfecto para combinar tanto con alpargatas como con sandalias planas como en la imagen. Tiene un precio de 29,99 €.
Vestido camisero con bordados y largo midi
Las prendas con bordados perforados van a convertirse en un imprescindible este verano y si lo llevamos a un vestido el acabado no puede ser más elegante y romántico. Las amantes de los looks en clave classic van a adorar este vestido camisero de Zara. Un diseño de largo midi confeccionado en algodón con cuello solapa, manga larga y cinturón al tono para remarcar la cintura. Tiene un precio de 59,95 €.
Vestido con escote corazón y manga globo
Quien dice verano dice vestidos, y si son blancos, mejor. Springfield ha reinventado el clásico modelo que se vende en Amazon. De largo midi y escote corazón con favorecedor corte debajo del pecho, cuenta con unas mangas globo que no le pueden quedar mejor. Un diseño que en función de los complementos puede ser ideal tanto para ir al trabajo, para un día de playa o para una cena con amigos en la ciudad.
Vestido mini con volantes
Los vestidos cortos vuelven con fuerza para dar un aire fresco y desenfadado a tu look. Esta alternativa de Stradivarius (25,99 €) con volantes y un favorecedor escote en V con tirantes finos te permitirá presumir de piernas infinitas en los días más calurosos.
Vestido ‘cut out’
Los vestidos con aberturas en puntos estratégicos como la cintura, el escote o la cadera tienen la capacidad de realzar más si cabe la figura de la mujer, como este diseño que propone El Corte Inglés. Confeccionado en tela jacquard sin mangas, con escote cerrado y detalle ‘cut out’ a los lados con falda de vuelo, este vestido blanco cuesta 49,99 €.
Vestido de largo midi y escote halter
Solo tenemos que recordar a la mismísima Meghan Markle y su vestido post-boda para confirmar que los diseños de cuello halter tienen algo especial, un extra de feminidad que Amazon ha reversionado con este precioso modelo con vuelo de largo midi y corte a la cintura. Es tan versátil que si lo combinas con sandalia plana no podrá faltar en tu maleta de vacaciones, pero si le sumas un tacón te convertirás en la invitada más elegante de la fiesta.
Combina tu vestido blanco con alpargatas o sandalias planas
Si prefieres mejor sandalias planas, no lo dudes, se han convertido en la mejor opción incluso para los looks de invitada. De tiras, con hebillas, cuerdas, tipo pala, de piel, con brillo, de ante o a tope de color, da igual, todas quedan bien si las combinas con un vestido blanco. Un básico que se resiste a abandonarnos año tras año y que se convierte en el mejor aliado para completar cualquier estilismo cuando el calor aprieta.
La realidad es que los vestidos blancos permiten cualquier tipo de calzado. Desde zapatillas deportivas, como suele hacer Alba Díaz, si buscas un outfit más informal, a 'stilettos' o sandalias de tacón para un efecto más sofisticado. Sin embargo, en verano las alpargatas piden paso como el modelo estrella por su versatilidad, esa que nos permite ir cómodas sin perder ni un ápice de estilo y, además, ganar esos centímetros de más que tanto estilizan. Palabra de la reina Letizia.
Las alpargatas son un calzado cómodo y perfecto para un look de verano ya sea de día o de noche, y junto a un vestido blanco el binomio es irresistible. Opta por un modelo con cuña para un look más elegante, o planas para una alternativa más casual. Arriesga con el color o un acabado metalizado para dar un toque más especial.