Amazon España estudia hacer de intermediario entre los bancos y los vendedores que comercializan productos desde su plataforma para ofrecer préstamos a estos últimos, tal y como ha podido saber Vozpópuli.
Cuando las tiendas decide abrirse una cuenta para vender a través de Amazon, automáticamente son obligadas a cumplir una serie de condiciones que, en ocasiones, son tan severas que pueden hacerles morir de éxito.
Hay tiendas que comienzan a recibir un montón de compras de un determinado producto y su estructura no les permite cumplir con los tiempos de entrega. Esto genera automáticamente una serie de penalizaciones que vienen impuestas por Amazon vía contrato, y puede suponer su quiebra. Amazon pone al cliente en centro de todo. Es el que manda, explican a este medio.
Para ayudar a estas empresas a disponer de un mayor músculo financiero, la dirección de la compañía en España ya ha puesto sobre la mesa posibilidad de llegar a acuerdos con los bancos para que estos ofrezcan financiación a los vendedores. No sería algo nuevo. En Europa es algo que ya ofrece Amazon Alemania.
El volumen total de clientes con el que cuentan tecnológicas como Amazon, Google o Apple es parte fundamental de la preocupación de los bancos. En el caso de que Amazon se adentrara en el universo bancario, ya tendrían una gran masa de clientes potenciales a los que ofrecer productos
A preguntas de este diario, las mismas fuentes aseguran que desde 2020 existe un servicio de este tipo para vendedores, y es el único país de la Unión Europea donde está disponible. Se trata de un servicio de financiación en el que Amazon no ofrece ningún tipo de crédito, sino que lo hace un tercero, en este caso ING. Amazon actúa como intermediario, mientras el banco ING ofrece el crédito. En cuanto a la posibilidad de que esto se replique en España, desde la compañía no niegan este extremo, limitándose a manifestar que no hacen comentarios sobre especulaciones o rumores.
Amazon Alemania: hasta 750.000 euros en préstamos
En el caso del acuerdo entre Amazon e ING en Alemania, Amazon ejerce como corredor -así lo refleja el comunicado firmado en su día entre ambas corporaciones- mostrando las propuestas de préstamo en el portal de ventas a las tiendas online que venden en la plataforma. A través de un enlace, los comercios son redirigidos a la página oficial del banco, desde donde se realiza la solicitud de crédito. Las tiendas pueden acceder, de esta forma, a préstamos que pueden llegar a ser de hasta 750.000 euros con un periodo de reembolso de un año.
Los usuarios finales -compradores- de Amazon España sí disfrutan de financiación de terceros, opción que se puede activar en el momento que se realiza la compra de un determinado producto.
Amazon dispone de licencia bancaria en Europa desde hace años. Es algo que, en privado, los bancos reconocen que les preocupa. Así las cosas, la compañía norteamericana no ha dado ningún paso para ofrecer directamente préstamos. No es solo Amazon quien preocupa a las entidades financieras. Otras grandes tecnológicas, como Apple o Google, disponen también de esa licencia. El volumen total de clientes con el que cuentan estas grandes corporaciones es parte fundamental de esa preocupación, porque en el caso de adentrarse en el universo bancario tendrían una gran masa de clientes potenciales a los que ofrecer productos. Competirían directamente con los bancos tradicionales.
