En España, a 31 de marzo del año en curso, había 20.452.800 ocupados, de los que 17.348.300 eran asalariados y cerca de 3,1 millones, trabajadores por cuenta propia, de acuerdo con la terminología que utiliza el Instituto Nacional de Estadística para realizar la Encuesta de Población Activa (EPA) cada trimestre. Es decir, por cada trabajador autónomo hay 6,6 asalariados en activo. Son, pues, el 15,15% de la fuerza laboral del país.
Si las comparaciones se constriñen a las pensiones, a 1 de abril, se cobraban en España poco más de 10 millones de pensiones, de las que 7,4 millones (el 73,8% del total) correspondían al régimen general; cerca de 1,98 millones, a autónomos; y el resto se reparte entre trabajadores del mar, de la minería del carbón, accidentes de trabajo, enfermedades profesionales y SOVI. Casi una de cada cinco pensiones que se cobran mensualmente en nuestro país corresponde a un trabajador autónomo. Esta proporción se mantiene en las pensiones de jubilación (20,8% del total) y en las de viudedad (19,8%), las más numerosas.
Un análisis pormenorizado de los datos sobre pensiones que publica el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) muestra que la edad media de acceso a la jubilación en el régimen especial de trabajadores autónomos era en el mes de marzo de 66,1 años (64,1 para los que lo hacían de forma anticipada y 66,8 para los que esperaban a tener la edad ordinaria), mientras que en el régimen general fue de 64,6 años (63,4 para los primeros y 65,8 para los segundos).
Con los números de los tres primeros meses del año, el 26,3% de los trabajadores autónomos se jubila de forma anticipada y el 73,7% lo hace con la edad ordinaria. Estos datos han cambiado algo en los últimos años, a medida que se han ido endureciendo las normas de acceso a la jubilación, tanto en el régimen general, como en el de trabajadores autónomos. Así, en 2014, se jubilaban anticipadamente el 13,6% de los autónomos y el 86,4% esperaba a cumplir la edad reglamentaria. Ejercicio tras ejercicio ha ido subiendo: en 2019 ya se superó el 16% y en 2022, el 18%.
Edad media de jubilación
La edad media de jubilación también ha ido aumentando en estos últimos años, aunque muy lentamente. Si en 2014 un trabajador autónomo se retiraba de la actividad laboral de forma anticipada a los 63,4 años, ahora, nueve años después, lo hace a los 64,1. Si espera a cumplir la edad ordinaria de jubilación, se retira con una media de 66,8 años, cuando en 2014 lo hacía con poco más de 66.
En el régimen general, el mayoritario en el sistema público de pensiones español, el incremento de la edad de jubilación anticipada se ha dejado sentir algo más: si en 2014 un trabajador salía del mercado laboral de forma anticipada con 62,1 años, en marzo de este año tiene que esperar a los 63,4 años. Si lo hace con la edad ordinaria hay poca diferencia: 65,4 años contra los 65,8 actuales.
Hay razones por las que se justifican estas diferencias. Un trabajador por cuenta propia suele cotizar la mayor parte de su vida laboral por mínimos y sólo cotiza más a la Seguridad Social cuando se va acercando la edad de jubilación. Esa ha sido la tradición y sigue siendo, aunque ahora de forma menos acentuada. Esa es la causa por las que en estos últimos nueve años el porcentaje de autónomos que se jubilan anticipadamente se ha duplicado. En el año 2014, la pensión media de una jubilación anticipada de un autónomo era solo de 955 euros mensuales; en marzo de 2023, de 1.187 euros.
Cuánto cobran los autónomos
Nada que ver, sin embargo, con lo que ocurre en el régimen general. Las personas que se jubilan de forma anticipada son, generalmente, trabajadores con vidas laborales muy largas y que han cotizado en su mayoría por máximos. Por eso, en 2014 cobraban una pensión media de 1.513 euros y ahora perciben 1.833 euros mensuales, muy por encima de la que perciben quienes esperan a la edad reglamentaria: 1.478 euros.
La pensión media que recibe un trabajador autónomo que se incorporó al sistema público de pensiones el pasado mes de marzo es de 1.002 euros mensuales (868 euros en 2014), mientras que las nuevas altas en el régimen general cobran una media de 1.650 euros, según los últimos datos del INSS. Son casi un 65% más altas.