La banca pone más difícil cambiar las condiciones de las hipotecas. En plena escalada del euríbor hasta niveles récord en una década, las entidades han subido más de un 30% el precio de las renegociaciones de los créditos concedidos para comprar vivienda. El tipo de interés que aplican ahora supera el 2%, frente al 1,55% al que pactaban las novaciones hace un año.
El cambio de paso del Banco Central Europeo (BCE) para atajar la inflación, con la mayor subida del precio del dinero en 22 años, ha acelerado la contratación de hipotecas a tipo fijo y ya suponen el 73% de los nuevos créditos inmobiliarios, un 14% más que hace un año. Pero el despegue del euríbor también está incentivando las renegociaciones con el banco para tratar o bien de cambiar el interés a tipo fijo o bien para rebajar el diferencial al que se liga el variable.
El tipo de interés TEDR, que equivale a la tasa anual equivalente TAE pero sin incluir todas las comisiones, de las nuevas renegociaciones alcanzó el 2,04% en julio, según los últimos datos disponibles del Banco de España. Se trata del mayor precio desde junio de 2019.
Las familias están ajustando el presupuesto para afrontar la crisis de precios y buscan alternativas que les de un respiro
A este tipo efectivo habría que añadir otras comisiones que se suelen aplicar en las renegociaciones, como las que se pagan para la novación del préstamo y que pueden alcanzar hasta un 1% del capital pendiente de amortizar. También habría que sumar los gastos de notaría, gestoría y de registro, entre otros.
Los hogares están ajustando el presupuesto familiar para combatir la crisis de precios, con la inflación descontrolada por encima del 10%. Y renegociar las condiciones de las hipotecas, con una rebaja de los tipos, puede dar un respiro para afrontar la cuesta de otoño.
El euríbor a doce años, que sirve de referencia para la mayoría de las hipotecas a tipo variable, cerró agostó en el 1,25% y escaló a su mayor nivel desde mayo de 2012. Para un préstamo inmobiliario tipo de 150.000 euros a 30 años y con un diferencial del 0,99%, el rally del euríbor encarecerá la cuota en 120 euros mensual y unos 1.400 euros al año.
El despegue del euríbor, que durante seis años se ha mantenido en negativo, está anticipando la firma de hipotecas ante posibles movimientos al alza en el precio. De hecho, la concesión de este tipo de préstamos superó los 6.500 millones de euros y registró récord desde diciembre de 2010.
Hipotecas al alza
Pero las malas noticias para los hipotecados pueden ir a más. Esta semana, el próximo jueves, el BCE tendrá una reunión clave para decidir si sube el precio del dinero otro 0,5% o un 0,75%, como defienden algunos miembros del Consejo de Gobierno. En cualquier caso, el mercado ya descuenta que el euríbor escalará al 2,5% en 2023, si bien algunas firmas de inversión, como Alantra, consideran que el ascenso se quedará en el 1,5% ante el posible riesgo de recesión.
Antes de que el impuesto a los bancos saltara al debate público, la primera subida del precio del dinero en Europa en once años extendió la preocupación entre las entidades de que provocara problemas de reputación al sector similares a los de las cláusulas suelo o las participaciones preferentes.
Sin ir más lejos, los bancos estaban preparando un plan de acción a nivel sectorial para proteger su imagen ante el posible malestar en la clientela por el encarecimiento del crédito. El plan era explicar que la subida del precio se debe sobre todo por el cambio de la política monetaria y no por una decisión comercial de las entidades.