Unicaja define el primer plan de sucesión de la cúpula tras la fusión con Liberbank. El banco ha elaborado junto con la consultora de cazatalentos Korn Ferry una guía detallada para los procesos sucesorios del presidente y del consejero delegado. Sentará las bases en caso de que cese cualquiera de los dos ejecutivos de forma "planificada o sobrevenida" en medio de rumores en la batalla de poder que apuntan a una salida de Manuel Menéndez, el actual consejero delegado.
Se trata de un plan de sucesión paralelo al reparto de poder comprometido con el Banco Central Europeo (BCE) para antes de que termine julio de este año y que se prevé remitir al supervisor tras la junta ordinaria de accionistas de finales de marzo. De momento, el consejo de administración ha aprobado ya las bases legales para la sucesión de la cúpula en aras de "asegurar la sostenibilidad en la gobernanza de la entidad", como recoge en la información remitida con motivo de la junta.
El diseño de la nueva estructura de poder ha desencadenado una batalla en el consejo formando dos bandos: el andaluz y el asturiano. El movimiento más agresivo ha sido el de la Fundación Unicaja, el primer accionista con el 30% del banco, que reemplazará a sus cuatro consejeros dominicales por pérdida de confianza y que eran cercanos a Braulio Medel, mejor relacionado con Manuel Menéndez por sus vínculos con el PSOE.
Con este movimiento, el bloque andaluz habría dado un vuelco a la situación y ya tendría más afines que el bando de Liberbank. Además de los cuatro consejeros dominicales de la Fundación, habría otros dos consejeros cercanos a Azuaga: la independiente María Luisa Arjonilla y el dominical designado por la familia Mayoral, Rafael Domínguez de la Maza.
Informe del BCE
Pero la inspección sobre gobernanza abierta por el BCE podría dar la 'puntilla' a Menéndez. El supervisor único sospecha de la sustitución de dos consejeros independientes el pasado año, que serían más próximos al bando asturiano, como publicó este medio. Los independientes sobre los que tiene el foco el BCE son la socialista Maite Costa e Isidoro Unda.
El Eurobanco prepara un informe de conclusiones de su inspección para dentro de un mes, según fuentes conocedoras, poco antes de que se celebre la junta ordinaria que aprobará las cuentas del pasado ejercicio. De confirmarse las dudas sobre la elección de estos dos independientes, el bando andaluz tendría argumentos de peso para pedir la dimisión o para presionar para que pusieran al menos sus cargos a disposición de la comisión de nombramientos, según las fuentes consultadas.
Compromisos de la fusión
El pacto de fusión contempla que el presidente de Unicaja deje las funciones ejecutivas antes de julio de este año, dos años después de registrar la integración, y que Menéndez sea revaluado como consejero delegado reforzado y máximo ejecutivo.
Como punto final de la lucha de poder, que se dirimirá tras Semana Santa, en el seno de Unicaja hay voces que dan por descontado que Menéndez será sustituido, según fuentes próximas al banco. La duda estaría entre si elegir a un primer ejecutivo de la casa o recurrir a un fichaje externo. "Está amortizado", resumen fuentes conocedoras.
Sin ir más lejos, el BCE vería con buenos ojos el fichaje de un ejecutivo bancario como número uno de la entidad para revolucionar la estrategia comercial, como señalan fuentes próximas al supervisor único.
La junta prevista para el próximo 30 de marzo en Málaga servirá de termómetro para detectar si la lucha en el reparto de poder de la cúpula pasa factura entre los pequeños accionistas. Entre los puntos del orden del día se tendrá que dar luz verde al nombramiento de los nuevos consejeros propuestos por la Fundación y ratificar a los independientes Unda y Costa.
