El banco HSBC, el mayor de Europa, consiguió más que triplicar en 2021 sus beneficios, que se dispararon un 223,4 % hasta los 12.607 millones de dólares (11.161 millones de euros).
Pese a esto, la facturación descendió un 1,74 % hasta los 49.552 millones de dólares (43.868 millones de euros), indicó el banco en su cuenta de resultados del ejercicio, remitida a la Bolsa de Hong Kong, donde cotiza.
La compañía achaca esta bajada de ingresos a las reducciones de los tipos de interés y a la caída de la facturación de sus negocios de mercados y valores, aunque también destaca el contrapeso que ejercieron otros sectores con una evolución positiva, como el de los seguros de vida.
El consejero delegado de HSBC, Noel Quinn, destacó el "buen progreso" de la estrategia corporativa en 2021 y reconoció que el buen rendimiento que experimentó el banco durante el año vino dado en parte por el contexto de recuperación económica global tras el impacto inicial de la pandemia de la covid-19.
El ejecutivo destacó que todas las regiones en las que opera el grupo consiguieron beneficios, aumentándolos un 146,2 % en el caso de Asia -su principal mercado- y consiguiendo salir de pérdidas en Europa o Latinoamérica.
En el último trimestre del año, los beneficios netos de HSBC aumentaron un 218,2 % en comparación con el mismo período de 2020, mientras que la facturación hizo lo propio en un 1,97 %.
El futuro de HSBC
De cara al futuro, Quinn resaltó la "inercia positiva" con la que ha comenzado 2022 y mostró su esperanza de poder "seguir ejecutando nuestra estrategia", aunque se refirió a la "inflación continuada" y a la posibilidad de que la pandemia genere "mayores incertidumbres" como factores de riesgo.
La junta directiva de HSBC aprobó un nuevo dividendo de 0,18 dólares por acción, lo que eleva el reparto total de 2021 a 0,25 dólares por cada título.
