El Santander comienza a llenar sus cuarteles generales después de más de dos meses de confinamiento. El banco ha incorporado ya al 25% de la plantilla y se espera que en junio se amplíe aún más, según reconocen fuentes sindicales consultadas por Vozpópuli. En este proceso de 'desescalada' el banco ha decidido hacer test a todos los empleados que trabajan en oficinas centrales, una decisión que CCOO califica de "discriminatoria" y por ello pide pruebas para toda la plantilla, "sin hacer distinciones".
A este respecto, la entidad ha explicado al sindicato que en la red de sucursales ya se están haciendo los test en base a tres criterios objetivos: personas que hayan estado enfermas de la covid-19, que hayan presentado síntomas o que hayan estado en contacto estrecho con pacientes de coronavirus. El Santander ha manifestado su intención de llegar a ofrecer la prueba a toda la plantilla aunque no sea una medida obligatoria.
En la red comercial ya hay operativas unas 1.900 oficinas. Esta cifra irá aumentando de manera paulatina conforme la 'desescalada' general vaya desarrollándose y se incrementen las necesidades del negocio. El banco tiene a 811 personas que de forma directa o indirecta están en cuarentena por el coronavirus. Además, hay 2.000 empleados más que se catalogan como personas de colectivo de riesgo, aunque la entidad advierte que este dato podría variar según los criterios de Sanidad.
Diferentes trabajadores afectados denuncian que el banco ha operado con "cierto oscurantismo" en la 'desescalada' en las oficinas centrales. Hay departamentos en los que se obliga a reincorporarse a todos los empleados (aunque tengan hijos sin colegio). También señalan cierta discriminación pues hay departamentos en los que los padres tienen que reincorporarse pero las madres tienen derecho a teletrabajar. También hay empleados que conviven con personas mayores (de riesgo) a los que se les hace acudir y exponerse.
En la sede de Boadilla los desplazamientos y viajes estarán restringidos, así como diferentes actividades. En concreto, sólo estarán abiertas las rutas internas a Faro, Solaruco, Logística y Centro Médico. Los autobuses reducirán su capacidad de 15 a cinco plazas y el uso de mascarillas será obligatorio, así como la distancia de seguridad entre empleados. Además, el banco recomienda evitar el uso de ascensores y el uso de escaleras para acceder al parking.
En el puesto de trabajo no se podrá compartir material de trabajo personal como bolígrafos u ordenadores. Las mascarillas y guantes usados se deberán depositar en los contenedores habilitados a la salida del centro de trabajo. Se evitarán las reuniones presenciales y, en caso de que sea imposible, las salas estarán ocupadas al 30% del aforo.
El Santander mantendrá cerrados los siguientes servicios
- Fisioterapia, odontología, nutrición y estética
- Zona comercial: colmado, agencia de viajes peluquería, óptica, tintorería-arreglo de ropa y calzado, y camisería-trajes a medida
- Gimnasio
- Golf
- Escuela infantil
- En el centro médico de CGS sólo se atienden consultas sanitarias