La mala racha bursátil de Telefónica le pasa factura a CaixaBank. El banco que preside Jordi Gual y dirige Gonzalo Gortázar ha experimentado un ajuste patrimonial de 219,6 millones de euros en los seis primeros meses del ejercicio una vez que la teleco se ha dejado un 10,41% en Bolsa en este periodo, según consta en el informe semestral del banco.
CaixaBank, con un 5,01% del capital Telefónica, es el tercer accionista de la operadora, por detrás de BBVA (6,96%) y la entidad financiera gala Société Générale (5,77%) y por delante del fondo estadounidense BlackRock (4,99%).
A finales de 2017, el valor de la participación en el balance del banco de origen catalán era de 2.109 millones de euros. A cierre del primer semestre del vigente ejercicio, en cambio, tras la mala evolución en Bolsa de Telefónica, valía 1.890 millones de euros.
En concreto, los títulos de la compañía que preside José María Álvarez-Pallete han pasado de valer 8,13 euros el pasado 31 de diciembre a 7,28 euros a finales de junio. Actualmente se intercambian a 7,67 euros por título.
Sin efecto en resultados
Este ajuste, en cualquier caso, se realiza contra patrimonio, por lo que no tiene reflejo en la cuenta de resultados de CaixaBank y no implica ninguna provisión realizada por el grupo. Además, la entrada en vigor de la nueva normativa contable IFRS 9, evitará que el banco tenga que cargar contra resultados las minusvalías en sus participadas, como le pasó a BBVA, que tuvo que anotarse contra los resultados de 2017 pérdidas por 1.123 millones de euros a consecuencia de la evolución bursátil de la operadora.
El informe semestral de CaixaBank muestra también que desde el pasado mes de abril, el banco ya no tiene cubierta la pérdida de valor de su participación en Telefónica, pues canceló el pasado abril el derivado (equity swap) por el 0,88% del capital de la compañía que había contratado en el verano de 2017.
"A 31 de diciembre de 2017, CaixaBank tenía contratada una microcobertura de valor razonable sobre un 0,88% de esta participación, que fue cancelada en abril de 2018", dice el citado documento.
En cambio, el grupo catalán ha elevado el equity swap por su participación del 9,46% en Repsol hasta el 4,73% del capital de la petrolera, desde el 2% que tenía a diciembre a pesar de que el valor de mercado de la participación de CaixaBank en la compañía a cierre del primer semestre era de 2.469 millones de euros, un 13,7% más que los 2.171 millones en los que estaba valorado el 9,64% del que disponía a finales de año.
Este tipo de derivados, en todo caso, son un instrumento habitual en la gestión de participadas y la entidad siempre conserva los derechos políticos de las acciones.
