Carrefour ha roto el contrato de limpieza que tenía suscrito con Eulen para 10 de sus hipermercados con el objetivo de internalizar el servicio, del que ahora se harán cargo sus empleados en plantilla.
Según ha podido saber Vozpópuli, este jueves por la noche hubo una reunión de urgencia para comunicar de forma interna la decisión. Según el convenio de grandes almacenes, por el que se rigen los hipermercados de Carrefour, la misma persona que realiza los cobros en caja o repone los lineales podría ahora pasar al servicio de limpieza, sin cambio ninguno en su nómina.
En concreto, los centros que van a comenzar a internalizar este servicio están ubicados en Cartaya (Huelva), Lleida, Villanueva de la Serena (Badajoz), Huesca, Sa Coma y Son Cotoner (Mallorca), Santa Pola (Alicante), Lalín (Pontevedra), Manzanares (Ciudad Real) y Jaca (Huesca).
Ahorrar costes
"Para poder soportar el peso de la pandemia internalizan funciones que antes estaban subcontratadas", cuentan fuentes conocedoras de la decisión de la cadena francesa.
Las mismas fuentes no descartan que la decisión se tome en otros hipermercados, ya que los contratos de limpieza se firman por "bloques" y tienen otros en vigor con empresas como Clece o Claro Sol. De hecho, insisten, el proceso podría ser progresivo y afectar después a otros centros del grupo, dejando de también subcontratar el servicio.
Por su condición de hipermercado, estos centros han sido de los más afectados durante la pandemia puesto que, aunque estaban abiertos -solo la parte de alimentación-, el consumidor ha optado estos meses por acudir a establecimientos más cercanos a su domicilio, evitando así el desplazamiento en coche a las afueras.
Una vez llegada la fase 1 de la 'desescalada', Carrefour se lanzó desde que pudo a vender textil y otros artículos en los 400 metros que le permitía el Gobierno, con el fin de levantar las ventas. Ahora, y con todos sus centros abiertos, la cadena está haciendo números tratando de ahorrar costes.