El que fuera CEO de Dia entre diciembre de 2018 y mayo de 2019, Borja de la Cierva, que ha declarado este jueves ante el juez de la Audiencia Nacional Alejandro Abascal en calidad de investigado, ha señalado que cuando era miembro de la Comisión de Auditoría y Cumplimiento de Dia los directivos, entre ellos el consejero delegado Ricardo Currás, les ocultaron las irregularidades que llevaron a una alteración de casi 52 millones de euros en las cuentas.
Fuentes jurídicas consultadas por Europa Press, que han asistido a esta declaración, explican que De la Cierva ha aseverado que en esa comisión desconocían por tanto las posibles irregularidades que se produjeron. Cabe recordar que tanto De la Cierva como el resto de los componentes de esa Comisión de Auditoría y Cumplimiento de la cadena de supermercados en los ejercicios 2016 y 2017 han sido citados a declarar en calidad de investigados por el juez instructor.
En este sentido, durante su declaración ha indicado que la supervisión que pudieran realizar desde esa comisión se limitaba a lo que obtenían de los directivos que tenían acceso al grueso de la información financiera, esto es, el que fuera consejero delegado de Dia Ricardo Currás, su 'número 2' Amando Sánchez Falcón, el director financiero Antonio Arnanz y el área de Auditoría Interna.
"Resultados atípicos"
Al hilo, ha apuntado que es en octubre de 2018, tras sustituir a Currás por Antonio Coto, cuando se decide encargar un informe 'forensic' a E&Y para detectar posibles irregularidades. Esta decisión llega después de que Coto ordene un análisis de previsión de ingresos en septiembre y vea en ese documento que hay "resultados atípicos".
Al detectarlo, se produce la reunión del CEO con la Comisión Auditora y deciden encargar ese 'forensic' para tratar de descubrir si se dieron malas prácticas. En él se apunta que los directivos ocultaron información al consejo (del que dependía la Comisión) y al auditor externo que fue PwC.
Sin embargo, otras fuentes consultadas por Europa Press, han explicado que De la Cierva --que sólo ha respondido al juez, al fiscal y a su abogado-- no ha sabido explicar porque comienzan a investigar en 2018 y no antes. Apuntan que no ha podido dar motivos, y se ha limitado a indicar que fue por que los resultados no eran los esperados.
Las declaraciones de este viernes
Dado que de las declaraciones previstas para el día de hoy sólo se ha producido la de De la Cierva y Richard Goldwing (quien fuera presidente de la Comisión de Auditoría), la comaprecencia de Juan María Nin se aplaza a mañana viernes.
También tendrá lugar mañana la declaración de otros dos miembros de ese órgano supervisor, María Luisa Garaña Corees --que fue vocal independiente desde febrero de 2017-- y Julián Díaz González --también vocal independiente y miembro de la misma en 2016 y 2017--. Ambas serán las primeras de la mañana a las 10.00 y a las 10.15 horas.
Acto seguido declararán en calidad de investigados los auditores de la consultora KPMG que auditaron las cuentas de la compañía en 2016 y 2017 Carlos Peregrina y María Lacarra. Y este mismo día, el magistrado tomará declaración como testigos al exCEO de Dia Antonio Coto Gutiérrez y al proveedor Javier Pérez Díez, en tanto director Comercial de dulces Y conserva HELIOS. El objetivo es analizar la relación de Dia con los proveedores para negociar descuentos comerciales.
Currás y Sánchez Falcón
Cabe recordar que en esta causa los principales investigados hasta la fecha son el ex consejero delegado del Grupo Ricardo Currás y el que fuera su número dos Amando Sánchez Falcón. Se les imputan delitos de administración desleal y fraude en las cuentas al haber presuntamente engordado los números de la empresa en 2017 mediante "prácticas irregulares" que supusieron un incremento ficticio de 51,8 millones de euros.
La investigación se inició después de la querella presentada por un grupo de accionistas minoritarios de Dia, y el juez en el auto de imputación de Currás indicaba que para la consecución de los objetivos propuestos para 2017, dado que las cifras propias del ejercicio no alcanzaban los mismos y se produciría un importante descenso en la cifra del Ebitda, "Currás ideó un plan, que en parte implicaba la utilización de prácticas irregulares previas, para alterar ciertas magnitudes con reflejo directo" en este balance, "lo que le proporcionaba una apariencia de sólida gestión".
Según un nuevo informe con fecha de 17 de agosto, al que también ha tuvo acceso Europa Press, el fiscal entiende que se han de mantener todas las imputaciones previas porque las alteraciones se produjeron "al efecto de elaborar unas cuentas anuales que trasmitieron al mercado una situación irreal de la sociedad, basadas en simples conjeturas o deseos del Consejero Delegado que, pese a no materializarse en las cifras del día a día, se mantenían".