La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha rebajado en dos décimas la previsión de crecimiento de la economía española en 2017 como consecuencia de la crisis catalana y del retraso en la presentación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Así lo asegura en su publicación Panorama Económico, en la que incide en que el PIB español aumentará el 3% durante este ejercicio, frente al 3,2% que estimaba en julio. La patronal considera que al final del año se habrán creado 500.000 empleos en España.
En su informe, la CEOE afirma que todavía es pronto para cuantificar el efecto que tendrá el desafío en Cataluña sobre la economía española, entre otras cosas, porque aún no se sabe durante cuánto tiempo se extenderá este conflicto y qué consecuencias políticas tendrá. Sin embargo, sus efectos ya se han dejado notar y podrían acentuar la desaceleración que se estaba prevista para el último cuatrimestre del año.
“Las caídas registradas en la bolsa española, el aumento de la prima de riesgo, la salida de capitales de España y el nivel de los ratings (que no se ha revisado al alza para España e incluso podría descender para Cataluña) son muestras claras de cómo afecta este entorno de incertidumbre”, ha precisado.
Pese a esta corrección a la baja, se espera que el PIB español crezca por encima de la media de la Eurozona (2%) y de economías como Estados Unidos (2,2%), Japón (1,5%) o Reino Unido (1,7%). Para 2018, el FMI cifra la mejora en el 2,5%.
Para la patronal, no ayuda a despejar las dudas que han surgido por el tema catalán el hecho de que se demore la presentación de los Presupuestos de 2018. No obstante, considera que la buena marcha de la economía hasta el verano ayudará a que la corrección del crecimiento no sea tan profunda.
En lo que respecta a los datos del tercer trimestre, la CEOE estima que el aumento del PIB sea del 0,8%, que se producirá gracias a la “solidez” de la demanda interna y del sector exterior. En cualquier caso, avisa de que los índices de confianza del consumidor y del comercio minorista descendieron con respecto al trimestre anterior, entre otras cosas, por las menores expectativas "sobre el empleo y sobre la economía en general".
