El presidente de la Confederación de Pequeñas y Medianas Empresas (Cepyme), Jesús Terciado, ha informado en un comunicado de que ha presentado su dimisión con efectos inmediatos, ante las dificultades para elegir a otra persona que ostentara sus funciones temporalmente. Este miércoles por la mañana, Terciado anunció que abandonaría temporalmente la presidencia de Cepyme mientras la justicia investiga la denuncia presentada contra él por tres miembros de la patronal de Salamanca por presuntos cobros irregulares.
El titular del juzgado de instrucción número 33 de Madrid investiga a Terciado por presuntos cobros irregulares a Cepyme a través de empresas de su propiedad, un asunto por el que también ha llamado a declarar en calidad de imputados a varios dirigentes de la patronal de las pymes la próxima semana.
En un comunicado, Terciado ha explicado que ha trasmitido su decisión por la mañana al Comité Ejecutivo de CEOE, para evitar "cualquier intento de instrumentalizar" la denuncia presentada contra él en el proceso electoral para la elección del nuevo presidente de CEOE.
Terciado delegará sus funciones temporalmente en alguno de los miembros del Comité Ejecutivo de Cepyme, de acuerdo con lo que contemplan sus estatutos, una propuesta que formalizará ante los órganos de gobierno de la confederación este mismo mes.
"Con honradez"
Según ha manifestado a los miembros del Comité Ejecutivo de CEOE, al igual que hará esta tarde ante los vicepresidentes de Cepyme y después ante sus órganos de gobierno, su convicción de "haber actuado correctamente como presidente de Cepyme, en defensa de los intereses de las pequeñas y medianas empresas, con honradez y transparencia".
Terciado fue denunciado en junio por posibles delitos de estafa, falsedad documental y apropiación indebida
En este sentido, les ha recordado que él mismo ha impulsado esos valores en los últimos años en Cepyme, "lo que ha hecho posible la realización de auditorías externas de las cuentas de la confederación y su publicación en la página web, la puesta en marcha de un sistema de control presupuestario y financiero, así como la implantación del código ético y de buen gobierno".
Aunque ha insistido en que no se encuentra inmerso en ninguno de los supuestos que contempla el código ético y de buen gobierno vigente en CEOE y en Cepyme, ha considerado conveniente delegar sus funciones "en la confianza de que ello permitirá evitar cualquier utilización interesada o torticera" de la denuncia de la que ha sido objeto en perjuicio de las organizaciones empresariales.
"Entiéndase ésta como una decisión firme y sincera en unos momentos en los que los empresarios, como la mayoría de los ciudadanos, esperan decisiones firmes y sinceras por parte de quienes ostentamos algún tipo de responsabilidad sujeta al criterio de la opinión pública", ha añadido. Terciado confía en que su decisión le permitirá realizar una mejor defensa de su actuación en Cepyme ante una denuncia que considera infundada.