La resolución de la oferta pública de adquisición (OPA) de SIX sobre Bolsas y Mercados Españoles (BME) ya tiene calendario oficial. El operador suizo ha conseguido superar con notable rapidez la primera fase del estudio, que es a su vez es el proceso más largo -no cuenta con un límite de tiempo- y ahora es la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la que está valorando dicha información para realizar el informe independiente que se le exige, según ha podido saber Vozpópuli por fuentes financieras.
Según la normativa del Mercado de Valores, el organismo que dirige Sebastián Albella tiene como máximo un mes para realizar dicho estudio. Luego será el Ejecutivo el que tenga un plazo de 60 días para aceptar o rechazar la operación, por lo que el Consejo de Ministros está obligado a pronunciarse antes de verano. Éste podría ejercer su derecho a veto si las intenciones de SIX no quedan del todo claras.
Cabe destacar que BME es titular 100% de la Central de Depósitos Española, de la Cámara de Contrapartida Central y también del mercado regulador, por lo que es lógico que exista cierto temor a que un operador que no pertenezca a la Unión Europea se haga con el control de la entidad y que en algún momento decida sacar de España alguna de estas patas, reconocen fuentes financieras.
No obstante, SIX incluyó en su carta de compromisos que mantendría la sede social en España durante al menos cuatro años. El operador suizo lanzó una OPA de 2.800 millones de euros por el 100% de las acciones de Bolsas y Mercados Españoles (BME) el pasado mes de noviembre. El mismo día que se comunicó esta operación, la Bolsa también admitió que mantiene conversaciones con la plataforma Euronext, que partiría con mayor ventaja estratégica.
Lobby del operador europeo
De acuerdo a fuentes conocedoras de las negociaciones, Euronext está "haciendo lobby" para advertir contra la OPA lanzada por SIX sobre la Bolsa española, destacando que la Bolsa suiza no permite operar en su mercado en las mismas condiciones que lo hacen las Bolsas de países que pertenecen a la Unión Europea. La Bolsa suiza no cotiza, por lo que no está sometida al escrutinio ante el mercado como sí lo están Euronext o BME. Además estaría deslizando posibles contingencias fiscales que acarrearía la compra de la Bolsa española por parte de la Bolsa suiza.
SIX se enfrenta al peor escenario posible, ya que este Gobierno es el menos favorable para plantar una operación a la Bolsa española. Y es que tanto PSOE como Podemos tienen en mente realizar un impuesto a las transacciones financieras, la conocida como 'tasa Tobin'. Se trata de una medida recaudatoria que consiste en gravar con un 0,2% todas las operaciones de Bolsa en las compañías que superen los 1.000 millones de euros de capitalización bursátil. Sin duda, un gravamen que penalizará a BME, el operador 'oficial' en España.
A esto hay que sumarle la caída en los volúmenes de negociación que viene sufriendo desde hace más de un año por culpa de los operadores alternativos que se han instalado en España. La propuesta suiza se ha realizado con una prima del 33% sobre el valor de la compañía. Más concretamente, a 33,4 euros por acción, lo que supone valorar al operador de mercados español en más de 2.800 millones de euros.