Durante las próximas horas comienza uno de los puentes más largos del año, el que encadena los festivos de la Constitución y el día de la Inmaculada Concepción, que desembocan en el fin de semana. Un periodo pródigo en desplazamientos masivos en los que, a diferencia de otras épocas vacacionales, el ciudadano se encontrará con una situación adversa: será el periodo de descanso con el precio de los carburantes más elevados de los últimos dos años y medio.
A la hora de llenar el depósito, los conductores se encontrarán el litro de gasolina algo más de un 5% más caro que a comienzos del pasado verano. La subida ha venido propiciada por una notable alza del petróleo en los mercados de materias primas en este periodo. El barril de Brent, el crudo de referencia en Europa, se ha situado en estos últimos días en el entorno de los 63 dólares, algo más de un 21% por encima de su cotización durante el verano.
Una evolución que ha venido dada por la expectativa de que los principales productores, los agrupados en el cártel de la OPEP y otros como Rusia, acordaran prolongar el recorte de la producción hasta finales de 2018 con el fin de estimular el precio de la materia prima. El acuerdo se concretó finalmente la pasada semana, en la reunión que mantuvo el organismo multilateral en su sede de Viena, aunque algunos de sus miembros propusieron que el compromiso fuera revisado el próximo mes de junio, ante el temor de que el mercado petrolífero sufriera un excesivo calentamiento.
La trayectoria alcista del petróleo se ha dejado sentir en las gasolineras, aunque a un ritmo menor, lo que no ha impedido que los precios en los surtidores se sitúen cerca de sus máximos en tres años, una circunstancia muy parecida a la que ha sucedido con los precios del crudo.
Estabilidad en 60 dólares/barril
Algunos miembros relevantes de la OPEP, como es el caso de Irán, señalaron en la última reunión del cártel que un barril de petróleo en el entorno de los 60 dólares constituye un escenario en el que se sienten cómodos con vistas al futuro. El brusco desplome sufrido por los precios como consecuencia, entre otros factores, de la independencia energética lograda por EEUU gracias a la técnica del fracking, llevó a los países productores a tomar cartas en el asunto cuando del barril perdió la referencia de los 30 dólares y las economías fuertemente dependientes de la materia prima comenzaron a hacer aguas.
Los expertos auguran un entorno relativamente estable para el mercado del petróleo, al menos mientras dure el acuerdo entre los principales productores, toda vez que han sido frecuentes los incumplimientos de este tipo de pactos por los intereses particulares de los miembros de la OPEP. Sin embargo, esta dinámica se ha roto por completo en esta oportunidad, dada la gravedad de la crisis sufrida por la materia prima entre 2014 y 2016, que hizo que las inversiones experimentaran un serio revés por el desplome de los márgenes.
Si se toma como referencia el mismo puente del pasado año, el consumidor encontrará la gasolina aproximadamente un 6% más cara en estos días. Con la referencia de 2015, el incremento se va hasta el 9%.