El coronavirus ha detenido casi totalmente el funcionamiento del país, sostenido tan sólo con el latido de las empresas obligadas a continuar insuflando aire al ciudadano para que disponga de los servicios básicos. El sandbox, el banco de pruebas para los proyectos tecnológicos de la banca y otras empresas del sector financiero, ha sido paralizado en el Congreso.
Se encontraba en tramitación parlamentaria pero según fuentes oficiales del Ministerio de Economía consultadas por Vozpópuli, su aprobación se ha interrumpido. "Aquello que no sea Covid-19 ha quedado parado", explican a este diario. Otras fuentes de total solvencia aseguran que la fecha de su aprobación "debería haber coincidido con el inicio de la pandemia".
La idea tan pronto pasase el trámite parlamentario era que el Tesoro lánzase la convocatoria y los promotores de los proyectos prepararan la documentación pertinente, a fin de entrar en la plataforma para realizar las pruebas de nuevos productos y servicios.
El sandbox es un banco de pruebas en el que los bancos y entidades financieras podrán hacer pruebas de sus productos en un entorno seguro, controlado, para lanzarlos de la forma más afinada al mercado
El citado sandbox era una de las medidas estrella de la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño. Respondía a las demandas de la banca y empresas del sector financiero. De hecho, BBVA fue uno de los bancos que reclamó la creación de la plataforma de pruebas, pero también existe interés por parte de otras corporaciones financieras del Ibex 35 como Santander, LaCaixa, Bankia, Sabadell o Bankinter.
Blockchain
También es interesante para las empresas de blockchain. "En mi campo de trabajo, que es el de los criptoactivos y la tecnología blockchain, la existencia de un sandbox regulatorio supone un salto de gigante para el sector. La regulación financiera existente no se ideó para enmarcar todas las innovaciones tecnológicas que surgen, y esto ocasiona colisiones entre normativa e innovación. Un sandbox permitiría testear estas tecnologías de forma ágil y recoger información para dar una respuesta normativa más eficiente", explica Alejandro Gómez De la Cruz, abogado especializado en blockchain y regulación financiera.
La participación de diversos agentes en los procesos relacionados con la banca es otro de los aspectos que podrían simplificarse. "Por poner un ejemplo, los mercados financieros poseen una fuerte intermediación por parte de agentes, en muchos casos exigidos por la ley, tales como depositarios centrales de valores o cámaras de compensación. Blockchain permite digitalizar (o tokenizar) activos financieros y que estos puedan ser transmitidos entre pares sin necesidad tecnológica de intermediarios. ¿Cómo podemos testear estos usos que a día de hoy no están recogidos en la normativa actual? Sin duda, creo que el sandbox es una potente solución", concluye Gómez de la Cruz.
¿Qué es un sandbox?
Un sandbox (arena de pruebas en inglés) es un banco de testeo en el que los bancos y entidades financieras pueden hacer pruebas de sus productos y códigos fuente informáticos en un entorno seguro, controlado, para lanzarlos de la forma más afinada al mercado.
Una iniciativa con la que, además, se pretende captar talento internacional y facilitar el acceso a financiación por parte de las empresas. Además, permitirá a los organismos de supervisión proteger al consumidor, incrementar la estabilidad financiera y prevenir situaciones como el blanqueo de capitales o la financiación del terrorismo, entre otras cosas.