No solo Deutsche Bank y Barclays estaban dispuestos a participar en una ampliación de capital que evitase la resolución de Banco Popular. Según documentación remitida a la Audiencia Nacional a la que ha tenido acceso Vozpópuli, los bancos de inversión Credit Suisse y Mediobanca también remitieron cartas a la entidad presidida entonces por Emilio Saracho mostrando su interés en participar en dicha operación.
De hecho, estas dos entidades fueron las primeras interesadas en participar en una hipotética ampliación de capital en Popular, pues enviaron sus misivas el día 8 (Mediobanca) y el día 10 (Credit Suisse) de mayo de 2017, un mes después de que Saracho afirmase en la última junta de accionistas de la entidad que el banco estaba abocado a una venta o a un incremento del capital.
Este medio se ha puesto en contacto tanto con la entidad helvética como con la italiana. Credit Suisse ha descartado hacer comentarios y de Mediobanca, hasta el momento, no ha recibido respuesta.
Las muestras formales de interés de Barclays y Deutsche Bank se realizaron el 18 de mayo y el 5 de junio, respectivamente. En sendas comunicaciones, estos bancos expresaban su interés por asegurar el 50% de una ampliación de capital de 4.000 millones, pues consideraban que había elementos que harían funcionar la operación, como publicó ABC. Además, el grupo de inversores mexicanos liderado por Antonio del Valle, junto a la familia Luksic, estaban dispuestos a aportar 1.000 millones de euros.
No vinculantes
En cualquier caso, Saracho explicó durante su comparecencia en la Comisión de Investigación de la crisis financiera, las muestras de interés de los bancos de inversión mediante cartas no quieren decir que quisieran comprar la entidad. "Lo que querían era participar en una operación de mercado, como hacen miles de veces; si de algo sé, es de eso", expuso el pasado 12 de julio.
"Esa carta no significaba nada con respecto a la ampliación de capital más que una muestra de interés, no es una obligación legal, no es dinero contante y sonante", agregó.
Esta versión también es compartida por la Junta Única de Resolución (JUR), el organismo que diseño la intervención de Popular, que explicó en una carta remitida a algunos afectados que, en el momento de la resolución, "ninguna solución privada" podría haber evitado la caída de Banco Popular, como adelantó Expansión. La capitalización bursátil del banco en los días previos a la intervención se situaba en el entorno de los 1.500 millones.
100.000 folios
Las cartas remitidas por Credit Suisse y Mediobanca se encuentran a disposición judicial entre los más de 100.000 folios nuevos que ha aportado Popular, ahora Santander, a la causa bajo requirimiento del juez Fernando Andreu, titular del juzgado Nº 4 de la Audiencia Nacional e instructor del caso.
Los papeles enviados por el banco que preside Ana Botín se suman a los 500.000 folios remitidos por PwC, que finalmente tuvo que llevarlos a la Audiencia en formato físico hace unos meses, así como a la documentación exigida por el magistrado al Banco de España, el BCE, la JUR, la CNMV o el Frob, entre otros.
Ante la información confidencial de clientes "ajenos a la investigación" disponible en los documentos, Santander ha solicitado su "expurgo", ya que defiende que "no guarda relación alguna con el objeto" del procedimiento judicial.