Deoleo considera que la solución a los aranceles impuestos por la Administración Trump no pasa por implantar fábricas de aceite en Estados Unidos.
El grupo español, líder mundial en la distribución de aceite de oliva, estima que el coste de levantar una planta en el país, y el de la mano de obra, podría ser superior al de asumir los aranceles, explican fuentes del mercado.
El Gobierno estadounidense anunció en octubre la imposición de aranceles por un valor cercano a los 7.000 millones de euros a bienes de los países de la Unión Europea (UE), que afectarán principalmente a España, Alemania, Francia y el Reino Unido.
El sector del aceite teme que Trump amplíe los aranceles al aceite de oliva español a granel, y no solo al embotellado
Entre las partidas que afectan al sector español, destacan códigos arancelarios relativos al aceite de oliva, tanto virgen como de otras variedades. La industria del aceite de oliva español advierte que el arancel del 25% al aceite embotellado provocará este año una reducción en las exportaciones de unas 150.000 toneladas de aceite, casi el 15% de las globales.
Ante las medidas impuestas por la Administración Trump, compañías aceiteras españolas se plantean la posibilidad de instalar fábricas en Estados Unidos y embotellar el aceite en el país para esquivar los aranceles.
Acesur, fabricante de marcas de aceite de oliva Coosur y La Española, planea montar un centro de producción en Estados Unidos que le permita exportar su producto a granel, como ha publicado Vozpópuli.
Sin embargo, para el líder mundial de la distribución de aceite de oliva, "el problema es mucho más complejo". "A Deoleo no le salen las cuentas de que la solución a los aranceles sea levantar una fábrica en el país", explican las fuentes consultadas. Además, añaden, el sector teme que la Administración Trump se ponga aun más dura y amplíe los aranceles al aceite a granel, no solo al embotellado.
Deoleo valora la posibilidad de introducir en Estados Unidos aceite español mezclado con el procedente de otros mercados
El grupo español, que el viernes aprobó en junta un acuerdo con la banca para reestructurar su deuda y evitar el riesgo del concurso de acreedores, estudia otras alternativas como sería la de mezclar aceite español con el procedente de otros mercados y salvar los aranceles impuestos.
El pasado mes de noviembre, en una comunicación enviada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Deoleo indicó que en el tercer trimestre del pasado año la evolución de sus negocios en Italia y Estados Unidos avanzaba "razonablemente bien".
La compañía española, propietaria de marcas como Koipe, Carbonell o Bertolli, aseguró en su comunicado al regulador del mercado que estaba constatando "una recuperación del volumen de aceite de oliva en ambos mercados [Italia y Estados Unidos].
