El Corte Inglés ha puesto en marcha en las últimas semanas una ofensiva para captar clientes de móvil, fijo y fibra, que comercializa bajo la marca Sweno. Es uno de los frentes que ha abierto para atraer nuevos compradores tras cerrar el peor ejercicio de su historia por la crisis del coronavirus, con unas pérdidas de más de 2.900 millones de euros.
Con los mostradores de la nueva compañía 'teleco' colocados en parte de los centros comerciales, El Corte Inglés ha dedicado el periodo estival a sumar clientes en esta nueva empresa, aliada con MásMóvil, al tiempo que pretende incrementar las ventas de sus tiendas.
Para ello, en las últimas semanas la empresa está ofreciendo vales promocionales a los clientes que compran dispositivos en el departamento de electrónica, por los que al contratar una tarifa convergente de fibra, móvil y fijo ofrece "hasta 150 euros" de "regalo" canjeables en futuras compras en los grandes almacenes. De hecho, también ofrece "hasta 100 euros" a quienes contraten la tarifa de forma directa.
Se trata de ofertas que El Corte Inglés tendrá en vigor hasta finales de septiembre con el objetivo de arañar negocio en el área de las telecomunicaciones, toda vez que el retail ha sufrido con dureza el golpe de la pandemia. No en vano, también está centrando parte de sus esfuerzos en poner en marcha Sweno Energía, su comercializadora de electricidad, y se espera que en este otoño lance de forma oficial El Corte Inglés Logistics.
Esta filial propia de logística, que contará con más de 5.000 empleados que hasta ahora trabajan en la matriz, tiene como objetivo no solo nutrir a los grandes almacenes, sino ofrecer el servicio logístico también a terceros para aprovechar el brutal crecimiento del comercio electrónico durante la pandemia.
El Corte Inglés se dedica a su nuevo plan
Tras presentar el que será su plan estratégico hasta 2026 a finales de julio, El Corte Inglés no ha esperado a terminar el verano para ponerlo en marcha, siendo los nuevos negocios mencionados algunos de los puntos más clave para la empresa en el próximo lustro.
De hecho, junto con la venta de alarmas -a través de Sicor-, la compañía que preside Marta Álvarez tratará de depender cada vez menos del negocio tradicional de los grandes almacenes para que estas áreas ganen peso en la tarta de la facturación de la empresa, que en el primer semestre del año empezó a incrementar las ventas.
Antes de cerrar el ejercicio, la compañía de grandes almacenes puso en marcha el primer ERE de su historia, que afectó a 3.292 trabajadores, de los cuales más del 60% ya había salido de la empresa a principios de julio.
