Atlantia sigue dando pasos para hacerse con la concesionaria de infraestructuras Abertis. El último ha sido presentar la documentación de la oferta en la Comisión Europea, que tendrá que emitir una de las múltiples autorizaciones que precisa el grupo italiano para lograr su objetivo. Un trámite más que añade presión a ACS en su intento por articular una oferta competidora de la lanzada por la compañía transalpina.
Y el ritmo de los relojes se puede disparar si se cumplen las expectativas de Atlantia en cuanto a los trámites para la aprobación de su oferta por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Los cálculos de la compañía italiana pasan por contar con el visto bueno del supervisor español a finales del presente mes de septiembre, lo que haría posible cumplir con el calendario que plantearon sus dirigentes a mediados de mayo, cuando hicieron públicos los primeros detalles de la OPA.
Por entonces, el objetivo de Atlantia pasaba por cerrar la operación a finales de año. En aquellos días no se hablaba de la posibilidad de una contraoferta que pudiera alargar el proceso. El pasado 21 de julio, ACS confirmó a la CNMV que estudiaba la posibilidad de presentar una oferta competidora por Abertis. Desde entonces, no ha habido nuevas comunicaciones oficiales.
La marcha de los trámites se ha traducido en una reacción al alza de la cotización de Abertis, hasta el punto de alcanzar un nuevo máximo histórico. Las acciones de la compañía con sede en Barcelona cerraron la primera sesión de la semana en 17,14 euros. De esta forma, podría decirse que actualmente el mercado está pagando por Abertis cerca de 650 millones de euros más que la contraprestación que propone Atlantia en su OPA.
Una oferta complicada
Los inversores siguen apostando por la llegada de una oferta competidora aunque, hasta ahora, Abertis había marcado un tope en el entorno de los 17 euros, el precio que el mercado valora como el que podría contemplar la contraoferta de ACS, si finalmente llega a concretarse. Sin embargo, el hecho es que los títulos de la concesionaria de infraestructuras han dejado atrás con facilidad esta cota.
El mercado es consciente de las dificultades con las que se está encontrando la compañía presidida por Florentino Pérez para armar su oferta debido al elevado volumen de la operación, en torno a los 17.000 millones de euros.
El grupo de construcción y servicios está valorando las posibilidades conforme a los planes que encargó a las entidades financieras que le asesoran en este proceso (JP Morgan, Lazard y Key Capital) y que contemplan la posibilidad de incluir a Hochtief, filial alemana de ACS, en la operación.
Los últimos movimientos tampoco han hecho mella en la cotización de la empresa germana, que mantiene próxima a la cota de 150 euros por título, también en zona de máximos históricos.
En cualquier caso, ACS debe moverse con celeridad si quiere llegar a competir con Atlantia por hacerse con el control de Abertis. La cuenta atrás se iniciará cuando la CNMV apruebe definitivamente el folleto de OPA registrado por la empresa italiana. A partir de entonces, cualquier propuesta competidora deberá llegar antes de que resten cinco días para que venza el plazo de aceptación de la primera presentada.