La trayectoria bursátil de las constructoras en los últimos cinco meses parece algo más que una nueva tregua de los mercados a uno de los sectores más castigados por la crisis. En este periodo, las compañías cotizadas han incrementado su capitalización bursátil en casi 3.500 millones de euros, aunque con especial incidencia en dos de ellas: FCC y Sacyr, que han conseguido duplicar su precio en bolsa en las últimas veinte semanas.
Se trata de una de las mayores reacciones bursátiles que ha experimentado el sector desde el inicio de la crisis, entre numerosos descensos que han llevado a estas empresas a situarse en zona de mínimos de la última década.
Los expertos coinciden en señalar que los mercados han premiado especialmente el esfuerzo llevado a cabo por las compañías para aligerar el abultado endeudamiento que acumulaban. Este proceso se ha llevado a cabo sobre todo a través de la venta de activos, un capítulo en el que las constructoras han estado especialmente activas en los últimos años.
Atrás quedan los tiempos en que las grandes compañías del sector reflejaban cifras de deuda por encima de los 15.000 millones de euros, como llegó a ser el caso de ACS y de Sacyr, e incluso por encima de los 20.000 en el caso de Ferrovial tras hacerse con el gestor aeroportuario británico BAA.
Fue precisamente la compañía controlada por la familia Del Pino la que comenzó a centrarse en reducir la deuda y fue también la primera a la que el mercado premió por ello, con lo que su reacción en estos últimos meses ha sido muy moderada.
Espectaculares revalorizaciones
En el extremo opuesto, Sacyr y FCC. La cotización de la primera se ha disparado un 110% en los últimos cinco meses, una vez que los accionistas de referencia que han abandonado el capital de la empresa desde el otoño de 2011 (su ex presidente Luis del Rivero, su ex vicepresidente Juan Abelló y las cajas) terminaron de salir. El último de los activos vendidos por Sacyr ha sido la Tour Adria, un destacado inmueble en París.
Mientras, FCC ha logrado revalorizarse un 101% en este mismo periodo. Los inversores han recibido de forma positiva el nuevo plan estratégico de la compañía, presentado a mediados de marzo y, sobre todo, la inmediatez de su puesta en marcha.
La tercera en esta peculiar clasificación es ACS, con una subida del 24% en los últimos cinco meses. La compañía ha reducido un 30% su endeudamiento aunque sigue a la espera de colocar en el mercado una serie de activos, mayoritariamente relacionados con el sector energético.
Avance de la internacionalización
El mercado también ha valorado la progresiva diversificación geográfica que han llevado a cabo las empresas y que se ha visto acelerada por la notable caída de la licitación de obra civil en España. En este capítulo, OHL ha sido la más destacada, hasta el punto de que un enorme porcentaje de su beneficio bruto de explotación se genera fuera de España.
No obstante, su comportamiento en Bolsa durante los últimos meses también ha sido moderado ya que los inversores llevan tiempo premiando esta notable internacionalización, hasta el punto de que la compañía controlada por Juan Miguel Villar Mir se ha situado como la tercera del sector por capitalización bursátil.
El descenso de la prima de riesgo española también ha contribuido positivamente a la escalada de las constructoras en Bolsa ya que deja un mayor margen a las empresas para que puedan salir al mercado para financiarse. De hecho, tanto Ferrovial como OHL, las que llevan mucho más tiempo con el favor de los inversores, ya han realizado algunas emisiones de deuda.