Incipiente lío a la vista en el mercado nacional de las infraestructuras. Una unión temporal de empresas liderada por Dragados (ACS) ha impugnado la adjudicación de las obras de la ampliación norte del Puerto de Valencia, una de las mayores licitaciones en lo que va de año en España, como adelantó Europa Press.
El concurso, valorado inicialmente en unos 660 millones de euros, había sido adjudicado a favor de un consorcio encabezado por Acciona tras una competición más que reñida con la oferta del grupo que encabeza Florentino Pérez.
Ya antes de la adjudicación, fuentes del mercado consultadas por Vozpópuli incidían en lo ajustada de la diferencia en la valoración de las ofertas.
Fue una ligera brecha de menos de un punto en el apartado sujeto a juicios de valor la que ha acabado inclinando, provisionalmente, la balanza a favor de la compañía de los Entrecanales pese a ser algo menos económica. Un escenario en cualquier caso ya previsto por los pliegos del concurso.
El comienzo de Acciona, en el aire
Las citadas firmas cuentan paralelamente con el apoyo de otras empresas, también valencianas, en sus UTE's. Acciona se ha asociado con Jan de Nul y Grupo Bertolín, mientras que Dragados ha hecho lo propio con Rover Maritime; Torrescámara y Cía de Obras, Dredging International España y Dravo.
La unión de empresas liderada por la constructora de los Entrecanales ya se preparaba para iniciar las obras del ansiado proyecto valenciano el próximo mes de septiembre tras años de retrasos por recursos judiciales y cuestiones políticas.
Sin embargo, el recurso de ACS ha supuesto que el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC) suspenda cautelarmente el procedimiento.
La tramitación del presente concurso había dependido hasta ahora en última instancia del ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible que encabeza el ministro Óscar Puente.
giledu
Dan vergüenza todos estos empreSAURIOS que deberían conformar una parte importante de una sociedad civil fuerte y que hiciese de este país un sitio dónde la clase política buscara el estado de bienestar de sus ciudadanos, en vez de unos autoprotegidos vergonzosamente que gastan dinero público como si no hubiese un mañana. En vez de eso, lo que hacen es rogar, suplicar contratos públicos a los que luego añaden variables (¿se acuerdan del canal de Panamá?) injustificadas que encarecen todo. Por ejemplo, las autovías cada vez duran menos y el mantenimiento es bochornoso. Solo puedo pensar en la forma en que se llevan las adjudicaciones... y no pienso en nada bueno. ¿Dónde estáis, los Flo, los Ortega, los Entrecanales, los March, los Fainé, etc, etc? Evidentemente a la Botín ni se le espera, siempre en el lado incorrecto de la buena historia.