¿Por qué el proyecto Distrito Castellana Norte, más conocido como ‘operación Chamartín’, sigue bloqueado en el Ayuntamiento de Madrid? Es una pregunta compartida por vecinos de la zona, ciudadanos en general, empresarios, comerciantes e incluso la promotora del desarrollo. El Consistorio ha retrasado cualquier decisión al respecto hasta la celebración de las elecciones generales, con el argumento de que tendrán que hablar del futuro de la estación de Chamartín con los nuevos responsables del Ministerio de Fomento. Pero el problema parece estar más en el fondo de la cuestión: los responsables de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento no terminan de creer en la operación, al menos como está planteada en la actualidad.
Al menos, la manifestación del concejal del área, José Manuel Calvo, en la última comisión no deja lugar a demasiadas dudas. Preguntado por parte de Ciudadanos por el estado del expediente para la aprobación definitiva del Plan Parcial que permitiría iniciar la operación, Calvo mencionó una conversación mantenida justo en la víspera de la reunión de la comisión con los técnicos de esta formación política en la que, según manifestó, hubo coincidencia en el diagnóstico de la situación y en “la cantidad de problemas para la ciudad”.
Según se recoge en el diario de sesiones del Pleno del Ayuntamiento, Calvo señaló a continuación que “apelar a que este proyecto tal y como está planteado va a aliviar los problemas de los madrileños, va a generar empleo, pues creo que ayer quedó perfectamente desmentido”.
Las palabras de Calvo se refieren a la polémica generada por los grandes atascos que se han producido en Madrid en las últimas semanas y que han tenido al Nudo Norte como uno de los principales escenarios. Precisamente, uno de los primeros asuntos que abordaría el proyecto Distrito Castellana Norte sería la remodelación de este punto conflictivo para el tráfico en la ciudad.
La excusa de la estación
En cuanto al empleo, la promotora Distrito Castellana Norte (DCN) estima que las obras que se prevén llevar a cabo a lo largo de veinte años generarían aproximadamente unos 120.000 nuevos puestos de trabajo. Algo que, a la vista de la intervención del concejal de Desarrollo Urbano Sostenible en la comisión, Ahora Madrid no parece creer.
Previamente, el director general de Planeamiento y Gestión Urbanística, Juan Carlos Lasheras, mencionó en esa misma comisión la necesidad de analizar, revisar y valorar los términos del expediente antes de proceder a su aprobación y mencionó, entre los asuntos pendientes de resolución “la concreción del proyecto de futuro para la estación de Chamartín”.
Es decir, de nuevo apareció el asunto de la estación, aunque ninguna de las partes implicadas conoce en concreto dónde está el problema con el activo de Adif. Llama la atención que ningún aspecto relacionado con la estación aparecía en las más de 2.200 alegaciones presentadas en su día por los ciudadanos a la modificación del Plan Parcial que hace posible el inicio de la operación.
Del mismo modo, la estación de Chamartín tampoco aparece reflejada den la encuesta encargada por DCN para comprobar la aceptación de la operación por parte de los madrileños y más concretamente con los vecinos de los barrios involucrados en el desarrollo, con un resultado más que concluyente: tres de cada cuatro daban su visto bueno.
Pero, eso sí, constituye una buena excusa para retrasar la decisión sobre el abordaje de la aprobación definitiva del Plan Parcial. El futuro de la estación de Chamartín depende del Ministerio de Fomento, que podría cambiar de titular tras las elecciones. “Si hay un Gobierno saliente, a lo mejor el siguiente Gobierno, la siguiente ministra o ministro de Fomento considera hacer otra cosa con la estación. Por lo tanto, tampoco parece demasiado descabellado darse ese margen hasta pasadas las elecciones”, señaló Calvo en la comisión.