Las negociaciones que mantienen los empresarios Alberto Alcocer y Alberto Cortina, los Albertos, con la banca acreedora para la refinanciación de su deuda podrían derivar en nuevas desinversiones en su cartera, especialmente en las cotizadas ACS y Ence. Los financieros están en pleno proceso de refinanciación de la deuda asociada a estas inversiones, toda vez que tendrán que afrontar en los próximos meses vencimientos cercanos a los 190 millones de euros.
Las principales participaciones de los financieros en empresas cotizadas se canalizan a través de diversas instrumentales, aunque la principal es Imvernelin Patrimonio. Esta sociedad cerró 2014 con pérdidas de más de 8 millones de euros y una creciente deuda a corto plazo. Los Albertos negocian extender los plazos de pago de estas cantidades aunque para facilitar el proceso se plantean proceder a realizar nuevas desinversiones tanto en ACS como en Ence.
En la primera, los Albertos llegaron a tener una participación superior al 14% aunque, en la actualidad, apenas supera el 6%. Gran parte de las ventas de acciones del grupo de construcción y servicios que han realizado los financieros ha tenido como trasfondo negociaciones con la banca acreedora.
Especialmente delicada fue la situación cuando ACS tuvo que suspender la distribución del dividendo a cuenta de los resultados de la compañía, una de las principales vías de ingresos de los Albertos para atender el servicio de la deuda. Fue entonces, al cierre del ejercicio 2012, cuando Alcocer y Cortina se vieron obligados a hacer caja con la colocación de títulos de ACS en el mercado con el fin de tranquilizar a los bancos, ante la imposibilidad de aportar nuevas garantías.
Escenario más cómodo
No obstante, la situación actual para los Albertos es sensiblemente más cómoda que la de hace tres años. Los financieros tienen valorada su participación en ACS en el entorno de los 21 euros por acción, mientras que la cotización de la empresa, al cierre de ayer, fue de 25,59 euros. En plena crisis y con la supresión del dividendo de la compañía, el escenario era mucho más complicado porque ACS llegó a cotizar por debajo de 11 euros.
Precisamente, Alcocer y Cortina podrían aprovechar esta circunstancia para seguir deshaciendo posiciones en ACS, lo que les permitiría apuntarse interesantes plusvalías. Aquellos momentos complicados enfriaron tanto su posición en la compañía como su histórica relación con el presidente del grupo, Florentino Pérez, con lo que sus ataduras al valor son ahora mucho menores.
En el caso de Ence, la participación de los Albertos no llega al 10% cuando en su día llegaron a controlar más del 20% de la compañía papelera. No obstante, el margen con esta empresa es sensiblemente inferior, toda vez que el paquete de acciones que controlan a través de Imvernelin está valorado en unos 35 millones de euros.
En cambio, los Albertos cuentan con la circunstancia favorable del buen comportamiento que está registrando Ence en lo que va de año, con un avance superior al 34%. Frente a esta trayectoria, ACS acumula retrocesos cercanos al 12% desde enero.