El sueño (obvio) de cualquier compañía es crecer. Y si este crecimiento es de una compañía española y se hace tanto dentro como fuera del país natal, mejor que mejor. Este mantra se repite en prácticamente todas las organizaciones: sí, el mercado local es maravilloso, pero la solidez, imagen y credibilidad que ofrece la expansión internacional es innegable.
Sin embargo, está demostrado que no es fácil. Más bien todo lo contrario. Una cosa es conocer nuestro mercado, aquel en el que la idea se ha gestado, y otra muy distinta replicar el modelo en otros países. Lo que está claro es que el primer paso es, muchas veces, el más complicado, y los expertos aseguran que no todos están dispuestos a hacerlo, porque, efectivamente, el primer gran escollo que deben atravesar es el miedo al fracaso.
Y eso es, precisamente, lo que hace grande a una organización: atreverse frente al conformismo. Lo hemos visto en varias ocasiones: para qué arriesgar si estamos bien como estamos en nuestra zona de pretendido confort.
Esta filosofía es, precisamente, la que marca la trayectoria empresarial de José María Fernández Capitán, propietario y fundador de Restalia. Poco dado a entrevistas, en alguna ocasión trasladó que, para él, una de las claves del éxito era no conformarse, y lo explicaba por su propia experiencia: al parecer, a su círculo le costó entender que, tras el éxito rotundo de su primer 100 Montaditos, decidiese dejar la comodidad y el éxito conseguido en su aventura de emprendimiento para querer crecer a través del modelo de franquicia, o cuando quiso expandir su negocio más allá de nuestras fronteras.
Sabía que no sería fácil, pero, tras confirmar su éxito en diferentes regiones de España y con más de 150 locales en funcionamiento, decidió que la compañía tenía la madurez suficiente para emprender su aventura internacional. Comenzó por Portugal, mercado natural en el crecimiento internacional por su cercanía, pero pronto se aventuró, incluso, con Estados Unidos.
La compañía está volcada en su expansión fuera de nuestras fronteras. Tras el asentamiento en el mercado nacional, están dispuestos a comerse el mundo con una firme apuesta por promocionar la marca España
Si bien tuvo que repensar su estrategia al otro lado del charco, nunca se rindió, mantuvo la “cabeza de playa” y siguió intentándolo en contra de lo que han hecho otras compañías a poco que se tuviera un natural tropiezo. De hecho, recientemente anunció la apertura de dos nuevos locales en Miami y ya estudia la expansión a otros estados tras más de 13 años haciendo las Américas.
No cabe duda de que, según las últimas informaciones que la compañía ha trasladado a los medios, el crecimiento internacional es su prioridad número uno, junto al desarrollo de nuevas marcas y consolidación de las actuales. Y lo hace, según trasladan, por su compromiso con la marca España y la firme convicción de que su marca icónica 100 Montaditos es la mejor expresión en el extranjero de un formato de “quick service restaurant” de producto netamente español, espejo de su cultura gastronómica y producido, desarrollado y operado por la mayor multinacional española en restauración comercial organizada.
El crecimiento en Estados Unidos y el salto a las Américas con su marca de hamburguesas The Good Burger, la rápida y exitosa expansión en Portugal y el lanzamiento del Proyecto Capitales del Mundo, cuyo objetivo es duplicar su presencia internacional pasando de estar en 20 grandes ciudades alrededor del mundo a 40 grandes en los próximos años, demuestran, sin duda, que este crecimiento internacional se ha convertido en la obsesión de Restalia.