La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) y la Comisión Nacional de la Energía (CNE) están investigando a las petroleras por prácticas anticompetitivas como el denominado efecto lunes, un patrón común consistente en la bajada de precios entre el domingo y el lunes que se acompaña de una subida posterior a partir del martes "no justificada por la evolución de las cotizaciones internacionales", según han advertido los reguladores en repetidas ocasiones.
Pese a esa treta, cuyo objetivo sería minimizar las subidas de precios en las estadísticas oficiales (que suelen recabarse el primer día de cada semana), España es uno de los países europeos con un comportamiento más inflacionista de los precios de los carburantes en lo que va de año.
Según datos del Boletín Petrolero de la UE, desde enero hasta la semana pasada (último dato disponible), el gasóleo, el combustible más consumido por los automovilistas españoles, se ha abaratado en España, como en la inmensa mayoría de países de la UE. Pero aquí lo ha hecho en menor medida. Su precio final de venta al público ha caído apenas un 0,89%, mientras que en la media de la UE lo ha hecho el triple: un 3,19% en la UE 27 y un 2,95% en la UE 17 (los países del euro).
En el caso de la gasolina, el desfase es mayor, porque si bien en la media de la UE 27 se ha abaratado (un 0,57%), en España, tradicional exportador de este combustible (le sobra capacidad de refino, al contrario de lo que ocurría hasta hace poco con el gasóleo), su precio de venta al público ha subido un 0,86%. En la zona del euro el encarecimiento desde enero ha sido del 0,1%, siete veces menos.
España, el séptimo país con la gasolina más cara
En el caso del precio sin impuestos, la variable que más preocupa al Gobierno, que se está viendo sometido a una creciente presión por parte de Bruselas para que incremente el Impuesto de Hidrocarburos, se repite el patrón, hasta el punto de que España presenta ya parámetros de lo que, desgraciadamente, no es: un país rico. Ya es el séptimo país de la UE con la gasolina más cara antes de impuestos, y el trigésimo en el caso del gasóleo.
Así, el precio de la gasolina antes de impuestos se ha encarecido un 1,28% en España desde enero mientras que en la UE 27 se ha abaratado un 0,4% y en la UE 17 apenas ha variado (+0,07%). Por su parte, el gasóleo se ha abaratado un 3,76% en España, un porcentaje inferior al de la UE 27, donde ha caído un 4,71%, y la UE 17 (-4,68%).
Desde enero, la cotización del petróleo Brent ha caído casi un 10% y el euro se ha mantenido relativamente estable: se ha depreciado un 1,8% con respecto al dólar, la moneda de referencia en el mercado petrolero.
Las petroleras, que han criticado insistentemente las estadísticas de la UE porque dicen que la comparación entre países no es homogénea, aseguran que los márgenes de los operadores “no han aumentado en 2013” y argumentan que la desaparición de la bonificación fiscal de los biocarburantes que entró en vigor desde el pasado 1 de enero ha encarecido los costes.
En concreto, la Asociación de Operadores Petrolíferos (AOP), patronal del sector, cuya sede, junto a la de las principales compañías, han visitado esta semana los inspectores de la CNC, asegura que, según sus cálculos, si se toma en cuenta ese efecto fiscal, el precio antes de impuestos de la gasolina habría caído un 8% y el del gasóleo, un 3%.
Un vistazo a las estadísticas de la UE confirma el fuerte comportamiento inflacionista de los precios en España desde mediados de diciembre, cuando todavía no aplicaba esa exención a los biocarburantes.
La gasolina, impuestos incluidos, ha subido desde entonces un 2,7%, mientras que en la UE 27 el encarecimiento se quedó en apenas el 0,3% y en la UE 17 fue del 1,39%. En el caso del gasóleo, la caída en España (impuestos incluidos) ha sido de solo el 0,89%, mientras que en la UE 27 ha sido del 2,13% y en la UE 17, del 1,4%.
Sin contar impuestos, la gasolina acumula una subida desde mediados de diciembre del 4,5%, que en la UE 27 se ha quedado en menos de la mitad, el 2,1%. Por su parte, el gasóleo se ha abaratado un 1,4% en España, frente al 3,76% de la UE 27 y el 3% de la UE 17.