Empresas

Omega (Alicia Koplowitz) y Orient Express pactan al fin la reforma del Hotel Ritz

La reforma del Hotel Ritz será un hecho a partir del próximo año. El centenario establecimiento acometerá una necesaria remodelación que lleva aparcada prácticamente cinco años, sobre todo por las diferencias entre los propietarios (Omega Capital, la sociedad de inversión de Alicia Koplowitz) y el grupo hotelero internacional Orient Express, que se resistía a invertir más dinero e incluso sopesó la venta de su 50%. 

El Ritz, emblema del sector hotelero en la capital de España y que en 2010 cumplió su centenario, verá por fin hecha realidad una reforma pendiente desde hace cinco años y que se ha ido postponiendo al tiempo que algunos de los otros grandes hoteles de Madrid acometían las suyas. Finalmente, Omega Capital y Orient Express, propietarios al 50% del Ritz, han llegado a un acuerdo para realizar la remodelación, que probablemente se llevará a cabo el próximo año.

Según fuentes del mercado, los socios del Ritz esperan las últimas autorizaciones del Ayuntamiento de Madrid para comenzar una reforma que afectará principalmente al interior del edificio, ya que la fachada apenas se podrá modificar al tratarse de un inmueble singular e histórico.

Aunque no ha trascendido cifras sobre el coste de la operación, las citadas fuentes aseguran que los trabajos a realizar en el edificio no son de una gran magnitud y que, además, la inversión será más reducida precisamente por las limitaciones de la fachada.

Sin embargo, no ha sido sencillo llegar hasta este punto. Desde hace algún tiempo, Orient Express se había opuesto a llevar a cabo inversiones para la remodelación del Hotel Ritz, ni siquiera para un ‘lavado de cara’. La compañía estadounidense no terminaba de estar satisfecha con los resultados de la inversión que realizó en 2003, junto con Alicia Koplowitz, para adquirir el hotel a la cadena Le Meridien, controlada por la entidad financiera japonesa Nomura, por unos 120 millones de euros.

Orient se planteó su marcha

Es más, Orient Express estudió durante un tiempo vender su 50% en el Hotel Ritz, circunstancia que paralizó los planes de reforma del establecimiento mientras que algunos de su categoría en la capital de España, como el Hotel Palace o el Hotel Villa Magna, entre otros, sí afrontaban este proceso.

Sin embargo, Orient no terminó de encontrar el comprador que pusiera encima de la mesa una cifra que le permitiera, al menos, recuperar la inversión realizada en su día para comprar el hotel. Los efectos de la crisis estaban ya muy presentes en el mercado y especialmente en el sector hotelero, que ha sido uno de los grandes perjudicados por la recesión. Esta circunstancia llevó a la compañía americana a dejar en suspenso la decisión de abandonar el capital del Ritz.

Ahora, nuevos estímulos alimentan la decisión de Orient Express como, por ejemplo, la posible llegada de Eurovegas a la capital de España y el hecho de que la candidatura olímpica de Madrid para 2020 cuenta con menos adversarios que nunca, ya que tan sólo Estambul y Tokio competirán con la capital de España. 

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli