El 'orden establecido' por los estibadores en los puertos volverá a ser cuestionado por las autoridades. Según fuentes internas, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) prepara una multa ejemplar contra el gremio por las restricciones a la contratación que supuestamente establecieron en el acuerdo que alcanzaron el 29 de junio de 2017 por el que la patronal (ANESCO) aceptaba subrogar los contratos de los estibadores portuarios -temporalmente- a cambio de que finalizaran las movilizaciones que se habían producido desde que el Gobierno anunciara su intención de liberalizar el sector.
La CNMC abrió un expediente sancionador contra la patronal y los sindicatos de la estiba el pasado noviembre tras haber detectado indicios de que este pacto restringe "la libertad de contratación de trabajadores para la prestación del servicio portuario de manipulación de mercancías”.
Para el regulador, este acuerdo también limitaría el margen de maniobra "de las empresas prestadoras de dicho servicio de participar o no en sociedades cuyo objeto social sea la puesta a disposición de los citados trabajadores”.
En el expediente, están implicadas la patronal, Asociación Nacional de Empresas Estibadoras y Consignatarias de Buques (ANESCO); la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar (CETM), la Unión General de Trabajadores (UGT), Comisiones Obreras (CC.OO.), la Confederación Intersindical Galega (CIG), Langile Abertzaleen Batzordeak (LAB) y Eusko Langileen Alkartasuna (ELA).
En paralelo a este expediente, la CNMC ha instruido otro contra varias empresas y sindicatos del Puerto de Vigo por sus supuestas prácticas competitivas. La infracción consistiría en la firma y/o aplicación, por parte de estas entidades, de un “pacto extra-estatutario”, rubricado en 1996, para la regulación de las relaciones laborales en el ámbito de la estiba en dicho puerto que se extralimitaba a la propia actividad estibadora.
Un largo conflicto
El anuncio del procedimiento sancionador contra la estiba, en noviembre de 2017, se produjo en un momento de tensión en los puertos españoles, en el que los estibadores mantenían movilizaciones como consecuencia de las maniobras del Ejecutivo de Mariano Rajoy para liberalizar el sector. Con ellas, pretendía cumplir una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que señalaba a España por incumplir la libertad de establecimiento de nuevas empresas y de contratación en sus puertos.
Un mes después de que el Gobierno aprobara el decreto ley para modificar el 'statu quo' de la estiba, Anesco y varios sindicatos alcanzaron un pacto para subrogar a los trabajadores de los puertos y se mantenía el 100% de los puestos de trabajo en los puestos mientras se negociaba el nuevo convenio colectivo.
La CNMC solicitó información a las partes implicadas ante las sospechas de que ese acuerdo iba en contra de la normativa vigente. Poco después, inició un expediente sancionador que derivará en una sanción a los firmantes y que se espera anunciar en los próximos días, según reconocen fuentes internas. La pregunta es cómo afectará esta decisión al débil equilibrio que se mantiene en los puertos españoles.