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CCOO: "Han puesto una pistola en la cabeza a los trabajadores de Coca-Cola"

El sindicato considera que se ha presionado y coaccionado a los trabajadores y se ha disfrazado el ERE de voluntariedad. Un total de 1.500 personas se ha apuntado a la oferta de salida de la empresa, muy superior a la que ofrece la reforma laboral.

Francisco Bermejo, delegado de CCOO en Coca-Cola, cree que los trabajadores se han apuntado al ERE de la empresa "porque les han puesto una pistola en la cabeza". Hasta el martes 18, según la empresa, un total de 1.500 personas se habían apuntado al plan de la empresa que prevé cerrar cuatro de sus once fábricas en España y aplicar un expediente de regulación de empleo que afectará a unos 1.100 trabajadores.

El representante de CCOO afirma que la empresa ha venido a decir a los trabajadores "o te apuntas o te echamos". Niega que en el caso de Fuenlabrada se hayan inscrito un 60% de los empleados. De una plantilla de 541 se han apuntado un total de 179, lo que no es ni mucho menos un 60% como dicen, añaden. Ellos han contado una plantilla de 381 que no es la real, afirma Bermejo.

Francisco Bermejo añade: "Es incomprensible que vayan a cerrar la fábrica de Fuenlabrada que es la segunda más moderna de Europa. Han entrado en los últimos años 300 personas desde ingenieros a gente de prácticas. No entendemos nada, salvo que se trate de un tema político para apoyar puntos en los tienen interés". Por otra parte, el sindicato prepara un recurso contra el ERE en colaboración con UGT, que se presentará en los próximos días. Los abogados de los sindicatos trabajan para terminar cuanto antes el texto y presentarlo ante la autoridad laboral.

CCOO quiere dejar claro que en ningún momento ha habido acuerdo con la parte empresarial. Hizo público un comunicado en el que dice que "ante las falsas afirmaciones hechas por Coca-Cola Iberian Partners y Coca-Cola Company respecto al ERE, la sección sindical de CCOO de Casbega manifiesta que es falso que se haya llegado a acuerdo alguno, por lo que el gabinete jurídico de CCOO sigue preparando la impugnación del mismo".

El sindicato ha calificado el ERE de cruel, "por su forma de actuar, innecesario, desde la lógica empresarial e ilegal en términos jurídicos". "Lo está intentado disfrazar bajo una supuesta voluntariedad de acogimiento a las medidas presentadas", añaden. Afirman que han acudido al engaño, coacción e intimidación de los trabajadores, "que una vez solicitado el 'acogimiento', se quedan a merced de la voluntad de la empresa que es quien en último término decide si se lo concede o no".

UGT, por un plan

Por su parte, UGT señaló que el único motivo para no alcanzar acuerdo alguno en el periodo de consultas ha sido la falta de voluntad mostrada por los representantes de Coca-Cola Iberian Partners. Les acusan de no querer negociar un plan industrial y de empleo que evitara el cierre de los centros productivos, los despidos traumáticos y la reducción al mínimo de la pérdida de empleo, "un plan para varios años, que diera seguridad y estabilidad y que fuera medible y evaluable".

"Esto -añaden en UGT- no es incompatible con la pretensión de la empresa de conseguir que la nueva compañía asegure su futuro mediante una estructura única, más ágil y significativamente más competitiva y fuerte, que le permita volver a generar crecimiento y empleo, según manifiesta en su anuncio Coca-Cola España".

Condiciones de la salida

Las condiciones en las que se han apuntado los trabajadores de Coca-Cola son las siguientes:

• Prejubilaciones para trabajadores/as mayores de 56 años, garantizando el 80% del salario neto percibido (con revalorización del 1% anual) y hasta los 63 años.
• Bajas indemnizadas a razón de 45 días de salario por año trabajado y un límite máximo de 42 mensualidades, más una cantidad adicional lineal de 10.000€.
• Recolocaciones a través de la oferta de 481 puestos de trabajo. En caso de que la recolocación suponga traslado geográfico, se abonara una indemnización de 15.000€ y 500€ mensuales en concepto de ayuda vivienda durante 2 años.

Una vez que se han apuntado los trabajadores, la empresa tiene hasta el 31 de marzo para contestar individualmente si aceptan su baja o no.

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