El director ejecutivo de la compañía china TikTok, Kevin Mayer, ha presentado su renuncia apenas unos días después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazara con prohibir el uso de la red en Estados Unidos, ha informado este jueves el Financial Times.
El que fuera un alto ejecutivo de Disney renuncia apenas pocos meses después de su nombramiento por la plataforma de vídeos cortos china que ha denunciado al gobierno de Estados Unidos por sus amenazas.
La empresa de propiedad china ha sido acusada de ser un riesgo para la seguridad nacional de Estados Unidos por la administración Trump. TikTok recibió recientemente un plazo de 90 días para ser vendida a una empresa estadounidense o debería enfrentarse a su prohibición en Estados Unidos.
"En las últimas semanas, a medida que el entorno político ha cambiado drásticamente, he hecho una reflexión significativa sobre lo que requerirán los cambios estructurales corporativos y lo que significan para el rol global al que me inscribí", ha dicho Mayer en una carta a los empleados que reproducen varios medios internacionales.
No obstante y pese a que las conversaciones entre la compañía y Trump continúan, Mayer asegura en el escrito que "en este contexto, y como esperamos llegar a una resolución muy pronto, quiero hacerles saber con gran pesar que he decidido dejar la empresa".
La Administración de Trump sostiene que TikTok supone una "amenaza" para la seguridad nacional de Estados Unidos, por lo que impidió sus transacciones a partir del próximo 15 de septiembre, y está buscando forzar su venta a una empresa estadounidense como Microsoft, que ha mostrado interés por la popular red social.
80 millones de usuarios en EEUU
TikTok, que en EEUU tiene más de 80 millones de usuarios, es una de las redes sociales que más ha crecido en los últimos años, donde se ha convertido en el principal entretenimiento para muchos adolescentes y un canal de marketing para importantes celebridades.
El Ministerio de Asunto Exteriores de China se opone a la venta forzada de TikTok, una operación que en su opinión viola los principios de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
De hecho, el Gobierno chino ve la intención de vender TikTok como un capítulo más de la guerra comercial entre Pekín y Washington, que intenta contener el cada vez mayor poderío tecnológico del gigante asiático, que ya ha visto como la firma de telecomunicaciones Huawei ha tenido que enfrentarse a restricciones.