Cura de adelgazamiento en Vips, el mayor grupo español de restauración. La cadena presentó este martes unos resultados anuales marcados por un “durísimo entorno macroeconómico” pero con “aspectos muy positivos” para el grupo, que desde finales de 2009 está inmerso en un Plan de Transformación centrado en adaptar su estructura a la nueva realidad económica. y un vistazo a sus cifras históricas revela la dimensión de ese plan, en el que Grupo Vips ha invertido unos 35 millones de euros y que la empresa da prácticamente por terminado.
Así, desde 2008, ejercicio que marca el inicio de la crisis en España, la compañía fundada y controlada por la familia Arango ha pasado de los 399 establecimientos que tenía entonces a los 334 del cierre del año pasado (65 menos).
Hay que tener en cuenta que en ese recorte de su red comercial tuvo un peso decisivo la venta, en 2009, de los locales de Starbucks en Francia (tenía 48 en 2008), que hizo que el número de establecimientos del grupo cayera a 346 en 2009. En 2010, su red se incrementó hasta 355, pero en los dos últimos ejercicios la tendencia es claramente descendente: 340 en 2011 y los citados 334 de 2012.
Por su parte, el recorte de plantilla en el último lustro (23,8%) ha sido mayor que el de la red comercial (16,2%). A cierre del año pasado, el grupo empleaba a 8.145 personas, 2.500 menos que en 2008 y un 13,8% menos que a cierre de 2011.
Desde que comenzó la crisis, las ventas de la empresa han caído un 21,3%, hasta los 358 millones del año pasado. El retroceso es ligeramente superior al experimentado por el sector desde 2008, siempre según las cifras del consejero delegado del grupo, Enrique Francia, que este martes cifró ese descenso acumulado en el 20%.
La empresa atribuye la situación de su sector a “la continuada caída de la confianza del consumidor que se encuentra en mínimos históricos y la constante subida del paro, así como por la disminución de la renta disponible de las familias derivada de las reducciones salariales generalizadas y del incremento año tras año de los impuestos”.
La compañía, que además de sus populares tiendas y restaurantes gestiona y opera, entre otras, las cadenas Ginos, The Wok y las cafeterías Starbucks en España y Portugal, redujo el año pasado sus pérdidas un 19,5%, hasta 19,44 millones de euros, con lo que acumula unos números rojos de 43,6 millones en los últimos dos ejercicios.
El año pasado, su deuda se disparó un 81%, hasta 43,9 millones de euros, tras el proceso de refinanciación que permitió a la cadena lograr nueva financiación bancaria por importe de 16,3 millones y alargar los periodos de repago de la deuda. Dentro de ese proceso, los accionistas aportaron 6 millones de euros y se comprometieron a realizar aportaciones adicionales de otros 9 millones en 2013 y 2014.
El consejero delegado de Vips señaló ayer, según Efe, que el grupo “tendrá que revisar la actividad de comercio ligada a las tiendas Vips”, que ha sufrido una caída de ventas del 14% en 2012 “al haber perdido la ventaja competitiva” que tenía la compañía antes de la liberalización de los horarios comerciales y de domingos y festivos en Madrid.
