Con un ambiente laboral enrarecido, marcado por el reciente anuncio de otros 16.000 nuevos despidos a escala mundial, una huelga indefinida el pasado verano y varios expedientes de regulación de empleo en los últimos años (el más reciente, presentado en abril en Zaragoza, afecta a más de 200 empleados), la Audiencia Nacional ha puesto freno al goteo de despidos en Hewlett Packard (HP) que vienen denunciando desde hace tiempo los trabajadores de la empresa estadounidense en España.
La Sección Primera de la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional ha obligado al gigante informático a readmitir a 42 empleados de su filial española a los que despidió a lo largo de los pasados meses de enero y febrero sin presentar el correspondiente expediente de regulación de empleo (ERE) y tras haber “omitido” el preceptivo periodo de consultas con los representantes sindicales que establece la legislación.
Según la Audiencia, ese goteo de salidas en tan corto espacio de tiempo superó los umbrales numéricos que se contienen en el artículo 51.1 del Estatuto de los Trabajadores y que determinan la existencia de un despido colectivo: diez trabajadores en las empresas con menos de cien empleados, el 10% de la plantilla en las que ocupen entre cien y trescientos trabajadores o 30 empleados en las que estén por encima de 300 efectivos. HP tiene siete centros de trabajo en España y unos 1.500 empleados.
La Audiencia ha declarado la nulidad de esos despidos “por omisión del preceptivo periodo de consultas” y ha decretado el derecho de esos trabajadores a reincorporarse a su puesto de trabajo, previa autorización de los afectados.
La sentencia, dictada el pasado 14 de mayo, condena a la empresa a la "inmediata readmisión" de los trabajadores despedidos, "con abono de los salarios dejados de percibir".
Los despedidos, de los que la mayoría (38 de 42) son mujeres, trabajaban en Hewlett Packard Procesos de Negocio España S. L. y prestaban servicio a diferentes entidades financieras como Barclays, Bankia y La Caixa.
La empresa prescindió de ellos entre los pasados 20 de enero y 10 de febrero y la Federación de Servicios Financieros y Administrativos de CCOO (Comfia) interpuso una demanda sobre despido colectivo ante la Audiencia Nacional, que ha dado la razón al sindicato.
A escala global, el grupo sigue inmerso en el drástico proceso de reestructuración iniciado hace dos años para adaptarse a la realidad de su sector. La semana pasada, la compañía de Palo Alto (California) anunció 16.000 nuevos despidos, que se suman a los 34.000 previstos inicialmente, tras anunciar un beneficio trimestral de unos 930 millones de euros y ventas de unos 20.000 millones.