La huelga convocada por el sindicato CCOO en el grupo Renfe, que se inicia el domingo a medianoche y se prolongará hasta las 23 horas del lunes, 15 de julio, ha obligado a la operadora ferroviaria a suspender la circulación de 320 trenes de pasajeros de los 990 previstos.
La organización sindical ha llamado a secundar el paro al personal del grupo Renfe (operadora, viajeros, mercancías, fabricación y mantenimiento y alquiler) para exigir más empleo, menos jornada y una consolidación salarial.
Los servicios mínimos fijados por el Ministerio de Fomento garantizan la circulación del 72 % de los trenes habituales del AVE y larga distancia, con lo que rodarán 280 de los 387 afectados por la protesta y se suprimen 107. En media distancia, se anularán 213 trenes y saldrán con normalidad 390 de los 603 afectados por la huelga, lo que supone un 65 % del servicios habitual.
Renfe ofrecerá a los pasajeros afectados por esta supresión, siempre que sea posible, viajar en otro tren en el horario más aproximado al adquirido, mientras que aquellos clientes que no desean hacerlo podrán anular o cambiar su billete para otra fecha sin ningún coste en todos los canales de venta de la operadora. En mercancías, se suprimen 187 trenes y circularán 63 de un total de 250, lo que representa un 25 % del servicios habitual.
En cercanías, en función de los núcleos, líneas y franjas horarias, se establece un porcentaje de entre un máximo del 75 %, en horario punta, y del 50 % del servicio habitual en el resto del día. Otro conflicto laboral, que se iniciará el próximo jueves 18 de julio, afectará al servicio de suministro de combustible de los aviones en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
Los sindicatos USO y UGT han convocado a los trabajadores de Spanish Intoplane Services (SIS), controlada al 100 % por Cepsa, a paros parciales de dos horas por turno los jueves y los sábado de cada semana ante la falta de avance en la negociación del convenio colectivo de la empresa. Esta huelga indefinida implica a 66 trabajadores y puede afectar a los vuelos de compañías como Iberia, British Airways, Vueling y Ryanair.
Entre las peticiones realizadas por los sindicatos en la negociación del nuevo convenio se encuentra una subida salarial del 2,5 %, establecer un límite de 220 turnos anuales y el pago por nocturnidad desde las 22.00 hasta las 6.00 horas.