Iberdrola Ingeniería y Construcción (Iberinco), la filial de la eléctrica que en mayo del año pasado fichó como consejero a Ignacio López del Hierro, marido de la presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, tiene todas las papeletas para llevarse, de la mano de Gas Natural, un buen pellizco del primer contrato relevante relacionado con el ATC, siglas del futuro almacén temporal centralizado de residuos nucleares.
Enresa, empresa pública que promueve el cementerio nuclear en el municipio conquense de Villar de Cañas, está a punto de adjudicar el contrato de ingeniería del proyecto, por un importe total (sin incluir el IVA) de 37,2 millones de euros. Fuentes conocedoras del proceso apuntan que tanto Iberdrola como Gas Natural están en una posición idónea para sacar tajada en todos los contratos. Bien de forma directa, bien a través de una empresa en la que ambas participan. Enresa, por su parte, asegura que todavía no hay una decisión tomada.
Una empresa participada por Iberinco está en el consorcio favorito para llevarse el lote más importante; de forma directa, lograría los otros dos
Esta primera gran licitación consta de tres lotes. El más importante, por un importe máximo (sin incluir el IVA) de 27,1 millones, corresponde a la ingeniería principal del proyecto. Tal y como informó el portal CapitalMadrid el mes pasado, se han presentado tres ofertas: por un lado, concurren Iberinco y la ingeniería de Gas Natural Fenosa; por otro, el consorcio entre la española Empresarios Agrupados (participada por Iberinco y Gas Natural) y la multinacional Westinghouse; y por otro, la vizcanía Idom.
Esta última sería la gran perdedora. El consorcio favorito para el principal contrato es el formado por la nipona-estadounidense Westinghouse, uno de los gigantes del sector, y Empresarios Agrupados, compañía de capital nacional que ha participado en casi todos los proyectos nucleares desarrollados hasta ahora en España.
Empresarios Agrupados tiene como mayor accionista a Técnicas Reunidas (43%), y en ella también participan Iberdrola Ingeniería, con un 25%, y Gas Natural, con un paquete similar. También tiene presencia minoritaria, y de forma indirecta, la constructora Isolux.
Sería, por tanto, una dulce derrota para Iberinco y para Gas Natural, porque ambas participan en el consorcio que se perfila como gran vencedor. Además, su alianza apunta como ganadora de los otros dos contratos, de una cuantía muy inferior.
Uno comprende los trabajos de ingeniería del módulo del almacén de residuos de media actividad (hasta 5,2 millones, sin incluir el IVA) y el otro, por hasta 4,8 millones, corresponde a la ingeniería del almacén de residuos de media actividad y del almacén de espera de contenedores.
El proceso acumula un retraso de meses. Los sobres con las ofertas tenían que haberse abierto en noviembre y las obras debían haber comenzado el pasado 15 de enero, según los planes iniciales de Enresa. Algunas fuentes sitúan la fecha del anuncio de la adjudicación en torno al próximo día 20.
La empresa pública, que con el ATC se enfrenta al mayor proyecto en sus casi 30 años de historia, está presidida desde el año pasado por Francisco Gil-Ortega Rincón, exalcalde de Ciudad Real, exsenador y exvicepresidente de las Cortes de Castilla-La Mancha. Un hombre de Cospedal, sin experiencia previa en el sector y en cuyo nombramiento intercedió muy activamente la presidenta castellano-manchega.
El marido de la secretaria general del PP fue fichado por Iberdrola Ingeniería tras su fugaz paso por el consejo de REE (no estuvo ni un día). El pasado 31 de enero, el empresario se incorporó a la comisión ejecutiva de Iberinco, la más importante, en lo que, en la práctica, supuso un ascenso, tras un año difícil para la filial. En 2012, la contribución de la actividad de “Otros negocios” al margen bruto de Iberdrola (que incluye Iberinco) alcanzó los 258 millones de euros, frente a los 435 millones de 2011, “debido básicamente al menor margen de Ingeniería y la menor actividad”, según la eléctrica.
