Ayer se celebró consejo de Pescanova para valorar las ofertas que pretenden cubrir una ampliación de capital que rescate la compañía y la sorpresa fue monumental, al comprobar que hay hasta cinco propuestas: la liderada por Grupo Damm, otra de Centerbridge, otra de York Capital así como otras dos de sendos fondos. Todas no vinculantes. A partir de ahora, se abre un periodo para estudiar las propuestas y ‘pasar a mayores’.
Así lo afirman fuentes cercanas a la operación, que indican que todas proponen inyectar 250 millones de euros y que las diferencias estriban en el grado de quita y capitalización de los acreedores.
Un asunto complicado, ya que mientras los bancos españoles del pool bancario están por la labor de aceptar quitas y facilitar la viabilidad de la compañía, algunas entidades internacionales han mostrado una postura dura, reacia a perdonar deuda.
Refinanciación pendiente
Todo esto ocurre cuando todavía está pendiente la refinanciación de la empresa, algo que debería haberse cerrado el 30 de noviembre y que comienza a acumular un retraso destacable, aunque la situación parece haber encontrado cierta tregua con las buenas ventas de diciembre, que marcarán máximos en mucho tiempo, así como en la amortización de la filial de Australia, que ha generado unos ingresos de algo más de 30 millones que han ido a cubrir parte de la línea de crédito urgente de los bancos aprobada poco antes del verano, de 56 millones de euros.
Todo apuntaba a que Grupo Damm, liderada por la familia Carceller, iba a ser la ganadora, presentándose casi en solitario. La empresa cervecera, accionista de referencia y con presencia en el consejo, se presentaba con Luxempart (también accionista y consejero), KKR y Ergon Capital.
Desde esta facción se defiende que su propuesta tiene proyecto industrial, no en vano los Carceller tienen experiencia en Damm, Disa (gasolina) y también están presentes en Ebro Foods.
En cualquier caso, la hoja de ruta que contemplaba que en Navidad ya habría refinanciación y nuevo consejero delegado, parece técnicamente imposible de cumplir ya.