Banco Santander quiere cortar cuanto antes la sangría de clientes de Banco Popular. Por ello, la entidad presidida por Ana Botín ha tomado dos medidas: anunciar que estudia una solución para los pequeños inversores que acudieron a la ampliación de capital de Popular de hace un año; y anunciar un plan de incentivos para retener y recuperar clientes a la red del banco comprado, explicada por el consejero delegado de España, Rami Aboukhair, a las territoriales durante los últimos días.
Según fuentes financieras consultadas por Vozpópuli, esta estrategia se ha intensificado tras cinco días de salidas de clientes adicionales a las que ya sufrió Banco Popular antes de su rescate y venta a Santander por un euro. El anuncio de la compensación a pequeños inversores, todavía por concretar, ayudó a que esta tendencia se frenara el mismo miércoles.
No han sido fugas de depósitos como las de hace una semana, sobre todo lideradas por las administraciones públicas y con grandes volúmenes, sino de clientes. La salida está siendo más pronunciada en el área de banca privada, cuyos clientes arrastran dinero en cuenta, sus fondos y sus sicav, según cuatro fuentes distintas del banco.
Desde la entidad y su matriz creen que la salida de clientes está totalmente contenida y es más un efecto arrastre de órdenes dadas antes del rescate de Banco Popular. Sin embargo, las mismas fuentes añaden que lejos de un efecto arrastre hay órdenes de salida nuevas. Explican que cuando los gestores acuden a frenar el portazo de los clientes, estos explican que se van por lo que ha pasado con el banco y las pérdidas que han sufrido, no por ningún tipo de temor a la solvencia, algo resuelto con la venta a Santander. Al descontento, se une a que hay grandes clientes que diversifican su cartera entre varias entidades, y ya son clientes de Santander.
Presión comercial
Hay cifras internas en Banco Popular que elevan el impacto de la amortización de las acciones y la deuda subordinada por encima del 7% oficial (280.000 clientes de 4 millones) de clientes. "En banca privada el porcentaje es mucho mayor", señalan.
Esta salida de clientes coincide con la presión que está poniendo sobre la mesa Banco Santander para que no sólo no se pierdan clientes sino que se recuperen parte de los que salieron en los últimos meses.
Así, el equipo dirigido por Rodrigo Echenique, presidente de Santander España; José García Cantera, director financiero; y Aboukhair ha puesto objetivos y ha pedido que los directores territoriales informen a diario de cómo va la retención y recuperación de clientes. Los ejecutivos y sus equipos tienen objetivos específicos en este sentido e incentivos en función del resultado. Aboukhair se ha ido reuniendo en los últimos días con las distintas territoriales, y se espera que en las próximas semanas haga un road show por distintas partes de España.
Dentro de este objetivo, los gestores de banca privada de Banco Popular llevaban días recurriendo al argumento de que los clientes esperaran un tiempo a que Santander desembarcara y decidiera si ofrece una solución.
Aboukhair se ha ido reuniendo con los territoriales en los últimos días y hará un 'road show' en las próximas semanas
Esta reparación fue adelantada por el vicepresidente en España, Juan Manuel Cendoya, en Cope, cuando señaló que "vamos a analizar bien todas las situaciones para ver qué soluciones se pueden tomar con los pequeños accionistas que son clientes del banco y que fueron a la ampliación de capital del Popular de hace un año".
Santander es consciente de lo que se juega estos primeros días de la fusión con poner un tope a la salida de clientes, y por ello está poniendo toda la carne en el asador, con argumentarios para la red del Popular y todo tipo de objetivos. Desde la plantilla de Popular defienden que también deben ser beneficiados por la solución, ya que tres cuartas partes de los empleados tiene acciones y muchos compraron los títulos con financiación.