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Quiebra Halcourier: el comercio electrónico no es la panacea para la mensajería urgente

La empresa de mensajería Halcourier irá a liquidación tras no haber alcanzado un acuerdo de ampliación de capital ni una venta de la compañía a un grupo competidor

  • Centro de paquetería.

El boom del comercio electrónico que vive España no es suficiente para sostener un negocio de mensajería que no cuente con suficiente músculo financiero. El Juzgado Mercantil número tres de Madrid ha declarado recientemente en concurso de acreedores a la empresa Nacional 10 Horas, que operaba en el sector del transporte urgente a través de 200 franquicias repartidas por toda España bajo la marca Halcourier. La empresa fundada por José María López Vallejo hace más de tres décadas se encamina ahora hacia la liquidación tras haber aplicado un ERE sobre su plantilla formada por 100 personas.

De acuerdo a fuentes cercanas a la compañía, durante los últimos meses se ha tratado de alcanzar un acuerdo con franquiciados para ampliar capital por importe de 10 millones de euros, sin éxito. También se ha negociado la integración de la empresa en un grupo competidor, pero finalmente las conversaciones no culminaron con un pacto satisfactorio.

Nacional 10 Horas, Halcourier, domiciliada en Alcalá de Henares (Madrid), terminó el ejercicio 2016 con un pasivo corriente de 10,1 millones de euros, de los que más de siete millones correspondían a deudas con proveedores. A fecha de 31 de diciembre de 2016, el pasivo corriente de la empresa de mensajería excedía al activo corriente en 1,42 millones de euros, por lo que se encontraba en causa de disolución.

La empresa ha aplicado un ERE sobre la plantilla de 100 empleados

Según las cuentas del pasado ejercicio de la compañía, a las que Vozpópuli ha accedido a través de Insight View, Nacional 10 Horas ingresó 18,7 millones de euros (0,7 millones más que en 2015), y registró pérdidas por importe de 0,68 millones (0,54 millones de pérdidas en 2015).

En la actualidad la administración concursal designada por el juez en Halcourier, FTI & Partners, está procediendo a la venta de la maquinaria y tratando de vender el software que la empresa empleaba como base de su sistema de reparto, explican las fuentes consultadas. Las mismas fuentes apuntan que la marca Halcourier está fuera del activo declarado en el concurso de acreedores.

La plantilla de la empresa está a la espera de cobrar los despidos pendiente de que se logren ingresos con la venta de los activos en la fase de liquidación o de ir al Fogasa. Expertos en materia concursal consultados advierten de lo problemático que suelen ser los casos de concursos de acreedores de franquiciadores, en los que los empresarios franquiciados son acreedores y deudores al mismo tiempo.

A pesar de que el comercio electrónico crece en España a un ritmo superior al 25% anual, facturando más de 5.000 millones de euros, el sector de la mensajería sobrevive con márgenes muy pequeños. "Los clientes de las empresas de mensajería son cada vez más fuertes y aprietan mucho en los precios a las compañías de transporte", comentan. "Aunque el negocio del comercio electrónico se ha disparado, para poder competir en la mensajería tienes que ser una empresa grande, las pequeñas no pueden hacerlo", añaden.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) incoó expediente sancionador contra diez empresas de mensajería y paquetería que operan en España el pasado mes de agosto, por posibles prácticas restrictivas de la competencia. Entre las empresas incluidas en el expediente no se encontraba Halcourier, y sí otras grandes del sector como la pública Correos o las multinacionales DHL, Federal Express o TNT.

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