Iberia espera retomar próximamente las conversaciones con los sindicatos para llegar a un acuerdo sobre el plan de ajuste que les presentó la semana pasada, aunque por el momento los avances han sido nulos. En un encuentro con periodistas, el consejero delegado de Iberia, Rafael Sánchez Lozano, señaló que la compañía no cuenta con un plan alternativo pero sí está abierta a diversas posibilidades que los representantes de los trabajadores les puedan plantear.
“No tenemos otro plan, si tuviéramos uno mejor lo hubiéramos presentado. Pero hay muchas posibilidades de ajuste. Por ejemplo, el ERE podría afectar a menos personas si se aceptara una mayor rebaja salarial”, señaló el ejecutivo como ejemplo. También apuntó a la posibilidad de llevar a cabo prejubilaciones que afecten a los sueldos más elevados o un plan de bajas incentivadas.
Como anunció Vozpópuli a primera hora de la mañana, los sindicatos están ultimando un calendario de movilizaciones que podría incluir jornadas de huelga en protesta por los planes de Iberia. En este sentido, Sánchez Lozano indicó que no entendería unos paros laborales que llegaran sin negociar previamente.
Sánchez Lozano aseguró que el plan pretende dar la vuelta a la compañía para que “pase de perder 300 millones a ganarlos” ya que, en caso contrario, “no tendremos acceso a los mercados de financiación”. Pese a que la caja de Iberia ha adelgazado 1.200 millones de euros en los últimos cinco años, la compañía aún dispone de algo más de 1.000 millones. “Precisamente, eso hace que sea el momento de hacer algo porque si no hacemos nada la caja desaparecerá y entonces no podremos ni despedir”.
Satisfecho con la gestión
El consejero delegado de la aerolínea aseguró que la fusión con British Airways reporta a Iberia sinergias que valoró en unos 100 millones de euros anuales por lo que “la situación de la compañía sería mucho peor sin la fusión”. Sánchez Lozano hizo hincapié en que la empresa “no puede volver a perder 1.000 millones en cinco años porque desaparecería”.
El ejecutivo no quiso dar detalles sobre los planes comerciales de la compañía que podría incluir la desaparición de algunas rutas emblemáticas como las que tienen por destino el Caribe de habla hispana. En cambio, sí incidió en el hecho de que Iberia se volcará en los clientes de clase business, “que son los que más gastan”.
Sánchez Lozano aseguró está “muy contento con la gestión al frente de la compañía” aunque los resultados no han acompañado su trayectoria.
