BBVA negocia en exclusiva la venta del grupo español de residencias Sanyres, con 18 centros residenciales, a la compañía francesa Orpea, uno de los líderes del sector en Europa. De acuerdo a fuentes conocedoras de la operación, que apuntan que las conversaciones se encuentran en una fase inicial, la valoración de la empresa española se situaría entre los 100 y los 150 millones. La adquisición por parte de Orpea de Sanyres supondría para la compañía francesa prácticamente doblar su presencia en España.
El banco presidido por Francisco González es el primer accionista de Sanyres, con el 33,5%, una participación asumida tras la compra de Caixa Catalunya. El otro principal accionista, de acuerdo a la Memoria de 2014 de Sanyres, es Cajasur. El grupo cordobés Prasa, que fundó la empresa de residencias hace quince años, se mantiene en el accionariado con un 27,5%.
Sanyres emplea a más de 1.500 personas y factura al año unos 50 millones de euros. La mayoría de las 18 residencias de la compañía se encuentran en Madrid y Andalucía, aunque también está presente en Galicia, Castilla y León, y La Rioja. El grupo gestiona otros cuatro complejos hoteleros para ancianos situados en Madrid, Puerto Banús, Huelva, y Marbella, además de un centro sanitario en Madrid.
El grupo Orpea, que cotiza en Bolsa, facturó el pasado año 2.393 millones de euros, un 22,8% más, y es propietario de 697 centros residenciales, de los que 354 se encuentran en Francia. La compañía también está presente en Alemania (156 centros), Bélgica (61), Austria (52), Suiza (27), Italia (15), Polonia (7), y República Checa (3). La compañía, fundada en 1989 por el doctor Jean-Claude Marian, emplea a cerca de 40.000 personas. El primer accionista del grupo es el fondo canadiense de pensiones CPPIB, desde el año 2013; la familia Marian mantiene el 7%.
En España Orpea gestiona 22 centros residenciales, la mayoría en Madrid. La compañía penetró en el mercado español en el año 2006 con la compra del grupo Care, con 15 centros, perteneciente entonces a la sociedad de capital riesgo Investindustrial, de la familia Bonomi. En 2012 adquirió seis residencias de la inmobiliaria Gedeco Avantis, que operaba en el sector a través de la firma Artevida.
Situación delicada
Deloitte, auditor de las cuentas de 2014 de Sanyres Sur, apunta una incertidumbre sobre la capacidad de la compañía para mantener la actividad. La consultora subraya en su informe de auditoría que sería necesario el apoyo de sus accionistas para obtener financiación.
La empresa admite en las cuentas de 2014, las últimas disponibles en el Registro Mercantil, haber registrado "pérdidas que han supuesto una reducción significativa del patrimonio neto, lo que le ha llevado a incurrir encausa de disolución". Además informa sobre la existencia "de un fondo de maniobra negativo de cuantía significativa, factores que ponen en duda el seguimiento del principio contable de empresa en funcionamiento (...)".
Sanyres, que en 2014 registró pérdidas por cinco millones, mantenía al término de ese ejercicio deudas a largo plazo con entidades de crédito por 34,1 millones, y de 1,8 millones a corto plazo. El grupo negoció en 2010 un acuerdo con los bancos acreedores para refinanciar su deuda, que contemplaba la venta de activos por 38,8 millones, pero no ha podido ejecutarlo.
