Ramiro Aurín es un barcelonés que observa con espíritu crítico el proceso remunicipalizador en su ciudad y en otras ciudades españolas. Denuncia que "en Barcelona se ha cogido bandera con el agua y en Madrid con la recogida de basuras", servicios que se van a remunicipalizar.
"El problema de las empresas públicas es cuando los costes no están completamente emergidos", dice, para poner el ejemplo del servicio de aguas de Berlín, "que tras recuperarse es el agua más cara de Europa con 5 euros el metro cúbico".
En el caso del agua, según dice el consultor, "no hay ningún problema, es muy difícil recordar cuándo se produjo el último corte del agua en nuestras casas. Desde 1850 empieza el abastecimiento público del agua". Aurín califica de "formidable" el Canal de Isabel II, la empresa pública del agua en la Comunidad de Madrid desde la cual Ignacio González saqueó presuntamente las arcas públicas. Este saqueo, asegura Aurín, "no hubiera sido posible de haber sido una empresa privada".
Empresa privada vs. pública
"Diversos estudios han demostrado que la misma persona rinde más en el contexto competitivo de la empresa privada que en el contexto relajado de un funcionariado
"El derecho al agua en España lo han garantizado las compañías que se han dedicado a ello. En Barcelona son 50.000 personas que no pagan el agua, y no se quedan sin ello si se establece que tienes un problema de pago. No hay un problema con el derecho al agua, es una falsedad, es marketing político", dice el experto.
¿Qué va a pasar?
"El tema de la municipalización es muy proclive a los discursos fáciles. Pero la realidad es que, si haces encuestas de satisfacción a los servicios públicos, todas salen positivas". Pese a todo esto, es cierto que los ciudadanos tampoco han acogido con oposición la posibilidad de la remunicipalización: "Si los ayuntamientos pueden mejorar una cosa, que la mejoren, pero si es solamente porque creen que su religión es mejor que la otra... yo es que soy laico".
