Mientras Miguel Ángel Flores, el organizador de la fiesta del Madrid Arena en la que murieron cinco jóvenes la noche del 1 de noviembre de 2012, era detenido este viernes por incumplir la víspera su obligación de acudir al juzgado como estipula su libertad condicional, a otros personajes relacionados con aquella tragedia, aún en fase de instrucción judicial, les va bastante mejor.
Es el caso de Mónica de Oriol, la presidenta del Círculo de Empresarios y propietaria de Seguriber, la empresa de seguridad privada que vigilaba el recinto en aquella fatídica noche.
Desde esa madrugada de hace año y medio, tanto Seguriber como (en menor medida) Umano, contratistas habituales de la Administración desde hace tiempo, han seguido adjudicándose contratos de organismos del Estado central por una suma nada despreciable: más de 11 millones de euros en total, de acuerdo con los datos disponibles en la Plataforma de Contratación del Estado.
Este portal recoge diez contratos adjudicados a Seguriber-Umano desde esa fecha. Destacan por su importe (superior a los 2 millones de euros) tres de ellos, todos adjudicados por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, que es, con diferencia, el organismo que ha encomendado los mayores importes de dinero público a las empresas de Oriol en este año y medio.
De esos tres, los dos primeros fueron resueltos por la Secretaría de Estado de Cultura en junio y octubre del año pasado, por importe, respectivamente, de 5,8 millones y 2,3 millones de euros (impuestos incluidos). El objeto en ambos casos era la vigilancia de diversos centros dependientes de la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales y de Archivos y Bibliotecas.
La empresa logró dos contratos en las dos semanas posteriores a la tragedia
El tercer contrato, el servicio de vigilancia de las instalaciones del Consejo Superior de Deportes (CSD, también adscrito a Cultura) en la calle Ferraz de Madrid por importe de algo más de 2 millones, es especialmente llamativo porque Seguriber se lo adjudicó apenas doce días después de la tragedia.
La empresa también logró otro contrato del Consorcio de Compensación de Seguros (dependiente del Ministerio de Economía) por un importe, esta vez, de 296.152 euros, apenas seis días después de aquella fatídica Noche de Difuntos.
Otro organismo estatal vinculado a Cultura (aunque su naturaleza jurídica es la de Organismo Público Especial) que también ha confiado en Seguriber es el Museo del Prado, tal y como se encarga de destacar la empresa en su web al glosar sus "casos de éxito", junto a los servicios que ofrece al Teatro Real y Repsol.
En junio del año pasado, la mayor pinacoteca del mundo adjudicó a la empresa de Oriol el Servicio de taquillas y los servicios de seguridad y atención al visitante por un importe de 218.891 euros, un euro por debajo del valor del contrato estimado inicialmente. Además, Seguriber logró antes de la tragedia del Madrid Arena hacerse con el principal contrato de servicios de seguridad privada del emblemático museo, cuya licitación ascendió a 9.370.885,04 euros y por un período de dos años que finalizó el pasado 31 de marzo. La empresa de Seguridad es miembro de la Fundación del Prado, y la propia Oriol está entre los "patronos internacionales" de la misma.
Oriol es consejera independiente de Indra, que supone un 2,46% de la facturación de su empresa
De la decena de contratos adjudicados a las compañías de Oriol por Organismos del Estado en este último año y medio, nueve corresponden a Seguriber y uno a la empresa de servicios Umano.
El 30 de abril de 2013 esa filial se adjudicó, por 84.643 euros, el “Servicio de Mantenimiento de los laboratorios señalizados como de riesgo biológico del Departamento de Investigación básica” del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), dependiente de Economía.
Oriol, que controla el 58% de Seguriber-Umano (fusionadas a principios de 2012) y hace unos días tuvo que disculparse públicamente tras quejarse de que personas "con cero cualificación" cobren un salario mínimo "aunque no valgan para nada", ha visto como a los contratos adjudicados por el Estado a su empresa se suman los que obtiene de Indra, la compañía del Ibex de la que es consejera independiente, cuyo mayor accionista desde agosto pasado es el Estado a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (20% del capital).
En 2013, los contratos de Indra para la empresaria supusieron 2,582 millones de euros, el 2,46% de la facturación de Seguriber-Umano. La cifra es un 10,3% inferior a la de 2012 (2,881 millones), pero según Indra supone un porcentaje superior de las ventas de Seguriber-Umano que en 2012, lo que indica un batacazo de la facturación en el último ejercicio.
Indra, que paga a Oriol 130.000 euros anuales por sus labores como vocal, ha prometido que este año sus contratos con Seguriber-Umano se van a quedar por debajo del 1% de las ventas de esa empresa. Así, preservará la independencia como consejera de la sobrina del ex presidente de Iberdrola Íñigo de Oriol, también vocal independiente de la constructora OHL y presidenta del Círculo de Empresarios desde 2012.