Un grupo de trabajadores de Terra, en su mayoría periodistas, que fueron despedidos el pasado mes de julio, presentó el pasado 13 de agosto una demanda judicial contra Telefónica de España en los Juzgados de lo Social de Madrid. En el escrito, interpuesto por 10 exempleados de los 20 que se vieron afectados por la medida, se demanda a Telefónica de España, S.A.U. (la matriz), a Telefónica Digital España, S.L., a Terra Networks España (la empresa para la que en realidad trabajaban, filial de Telefónica) y a Lavinia Interactiva (la compañía que 'de facto' les tenía contratados y a cuya sede "nunca acudieron") por despido y cesión ilegal de trabajadores.
Lavinia es una empresa próxima a la órbita del Partit del Socialistes de Catalunya (PSC) que, con sede central en Barcelona, había ejercido de subcontrata para buena parte de los aproximadamente 60 profesionales que hasta el pasado mes nutrían la plantilla de Terra. Uno de ellos relata a este diario que "cuando se me contrató en Terra se me dijo que por temas legales tenía que ser a través de una productora, algo que en ese momento vino a dedo porque estaba gobernando el PSOE. Sólo se me pidió que enviara el currículum a Barcelona, y a las dos semanas ya estaba trabajando, contratado por la productora pero desde Madrid". Aquí acabó su relación con Lavinia, asegura, hasta el día en que prescindieron de él y volvió de nuevo a tener noticias de Lavinia, esta vez mediante la correspondiente carta de despido.
Los trabajadores creen que una empresa como Telefónica, de las principales de España, no puede utilizar prácticas de contratación tan poco ortodoxas
En la demanda, los trabajadores argumentan que nunca han trabajado para Lavinia, "pues desde el primer momento he prestado mis servicios para la marca Terra, perteneciente a Telefónica de España, S.A.U.". Varias pruebas avalan esta tesis. En primer lugar, que trabajaron físicamente en las distintas sedes de Telefónica, bien fuera en la sede de la calle Don Ramón de la Cruz de Madrid, en la Avenida de las Dos Castillas de Pozuelo de Alarcón o en el Distrito Telefónica, la nueva sede central de la compañía, situada en el barrio de Las Tablas, al norte de la capital de España. También argumentan que siempre recibieron las órdenes directamente de jefes que eran empleados de Telefónica y de Terra y en ningún caso de Lavinia, por lo que, siempre según los denunciantes, "se trata de un caso flagrante de cesión ilegal de trabajadores".
Terra prescindió también de Juanjo Amorín, miembro fundador de Terra Networks en 1998 y que había sido repescado por la empresa apenas un año antes. Amorín tiene una dilatada carrera en el sector de los medios de comunicación online, pues ha trabajado en compañías como 20 Minutos. La salida de Amorín ocurrió unos cuantos días antes de que se produjera el despido masivo de trabajadores, y según la versión que mantienen algunos periodistas, se produjo por su negativa a ejecutar él mismo los despidos en Terra, tal y como le había pedido su directo superior Yago Castillo.
La compañía aún no tiene constancia
Este periódico ha intentado recabar la respuesta de Telefónica, pero desde su departamento jurídico aseguran no haber tenido aún notificación de la demanda, por lo que no pueden responder ni ofrecer su versión al no tener el texto completo de la misma. Es posible que el periodo agosteño en el que nos encontramos retrase los procedimientos administrativos. Los exempleados de la empresa han sido informados, por su parte, de que aproximadamente en noviembre o diciembre podría celebrarse el juicio, después de que ninguna de las partes se presentara al acto de conciliación.