A la Federación Española de Farmacéuticos Españoles (FEFE) no le han convencido las medidas propuestas por el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, para ahorrar en el gasto en medicamentos en nuestro país. En particular, rechazan de manera tajante la propuesta de eliminar de manera total el copago de medicamentos incluido por el PSOE en su ‘Programa Común Progresista’ formado por 370 medidas, ya que implicaría un “riesgo moral”.
Esta oposición por parte de FEFE a la eliminación del copago no es nueva. Desde la patronal no sólo han defendido la existencia general de copagos en medicamentos, sino que creen que los copagos deberían alcanzar un cifra del 10% total de la factura.
Desde esta organización aseguran que la existencia del copago desde el año 2012, fruto de una reforma promovida por el Gobierno del Partido Popular, “ha cambiado la percepción de los pacientes sobre las farmacias, alejando el concepto de establecimiento de distribución gratuita de medicamentos, e indirectamente potenciando los productos de Consumer Health”.
Este "cambio de percepción" de la que hablan ha beneficiado mucho a las oficias de farmacia. Su facturación no hace más que crecer, impulsada por lo de que denominan como Consumer Health. Es decir, productos de autocuidado sin receta que no son medicamentos destinados a tratar dolencias. Según el último informe publicado por la consultora Iqvia, este tipo de productos generaron una facturación de 4.077,7 millones de euros, un 2,6% más respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
Ahorro del gasto farmacéutico
Durante 2018, el conjunto del gasto público de medicamentos alcanzó los 17.482 millones de euros, lo que supuso un crecimiento del 4,6% interanual, dos puntos por encima de la tasa de crecimiento de la economía española durante el mismo periodo, que se quedó en un 2,6%. De hecho, la industria farmacéutica se ha visto obligada por primera vez este año a devolver un total de 150 millones de euros para compensar que el gasto farmacéutico creció a mayor ritmo que el PIB.
Desde organismos como la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), han propuesto medidas para paliar este gasto, como la imposición de una versión renovada de la subasta de medicamentos aplicada hace unos años en Andalucía o la revisión de los copagos según los niveles de renta.
La subasta de medicamentos fue ampliamente rechazada por parte del sector farmacéutico y por FEFE en particular, ya que la tildaron de “cortoplacista”, aunque no se oponen a revisar los niveles de copago en función de la renta, especialmente para aquellos pacientes que cuenten con dificultades económicas o en riesgo de exclusión.
Denuncian el bajo nivel de precios
Otro de los principales debates que ha surgido en los últimos meses es el enorme desabastecimiento que se está produciendo en las oficinas de Farmacia. La patronal, que agrupa a más de 22.000 farmacias, mantiene que una de las causas de los desabastecimientos es el bajo nivel de precios que se alcanzó en el actual sistema de precios de referencia.
Según Farmaindustria, el 50% de los medicamentos que se dispensan en España tiene un precio inferior a 3,5 euros de Precio de Venta del Laboratorio (PVL), por lo que desde FEFE no parecen ver necesario una bajada de precios para los clientes de sus farmacias.
Por el contrario, este mismo jueves, el Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado la orden del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social por la que se actualizan los precios de referencia de 16.454 medicamentos del Sistema Nacional de Salud (SNS), lo que se estima que suponga un ahorro de 118,49 millones de euros.
Este sistema, implantado en España desde hace 20 años con el objetivo de controlar los precios de fármacos financiados, permite crear conjuntos de referencia cuando se cumplen diez años de la autorización del tratamiento en España, o en cualquier país de la Unión Europea, siempre que exista, al menos, un medicamento financiado en el SNS distinto al original y sus licencias.
Además, facilita la revisión del precio de los ya existentes. De hecho, y tal y como ha informado el departamento que dirige en funciones María Luisa Carcedo, el precio de referencia de cada conjunto de medicamentos se calcula en base al menor coste por terapia y día de las presentaciones incluidas en cada uno.
Ante esto, FEFE propone que se fije un precio mínimo, se reforme el sistema de precios de referencia con vistas a su simplificación y se aumente la competencia mediante la reglamentación de los ‘precios notificados‘ y el copago evitable.
Caídas en las ventas
La consultora Iqvia, en su último informe en el que analiza el impacto que tendría la nueva Orden de Precios de Referencia (OPR), que acaba de iniciar su trámite, resalta que las actualizaciones de precios ocurridas en los últimos doce meses suponen un caída del 1,3% sobre las ventas acumuladas en el periodo mayo 2018-abril 2019 y el efecto de la OPR añadiría un 1,7% (el doble que la OPR de noviembre de 2018).
Iqvia añade que el 97% del impacto se concentraría en productos no genéricos. Y añade que “la disminución real será mayor y dependerá de la penetración de los nuevos genéricos”. En todo caso, los expertos de Iqvia matizan que la disminución del gasto farmacéutico será inferior a las estimaciones de impacto realizadas para cada segmento, “teniendo en cuenta que el 20% de las unidades del mercado de reembolso se dispensan con cargo al mercado privado y no se considera el efecto en la reducción de aportaciones según los tramos establecidos de copago".