Comienza un nuevo curso y con él nuevas propuestas para captar clientes y ofrecer diferentes productos que se adecuen a cada consumidor. Los fondos han aguantado un primer semestre muy complicado, tanto en renta variable como renta fija, lo que ha provocado salidas de capital y mucho movimiento en las carteras.
Con la llegada de septiembre comienzan a verse las estrategias que llevarán algunas gestoras de cara al 2019 y parece que la tendencia irá hacia los fondos sostenibles con criterios ISR.
El Santander ya comenzó el 2018 con los deberes hecho con la base perfecta para hacer crecer y dar a conocer esta gama de productos que está liderados por Lola Solana, la gestora estrella de la entidad. Entre los tres fondos que tienen en el mercado ya gestiona más de 400 millones de euros, una cifra muy buena teniendo en cuenta la dificultad de captar patrimonio.
BBVA ha sido el último gran banco en dar este paso. El nuevo fondo, denominado BBVA Futuro Sostenible, es un fondo de 'asset allocation' global que invierte en renta variable, deuda pública y crédito, aplicando criterios de ISR en todas las tipologías de activo.
El fondo tiene un perfil de riesgo defensivo –invierte un máximo del 30% en renta variable– y está destinado a un inversor de perfil conservador que busque un enfoque prudente de crecimiento y la sostenibilidad de sus inversiones.
Bankinter y CaixaBank
Bankinter, por otro lado, ya contaba con productos con estos criterios, aunque se han publicitado menos. El Bankinter Sostenibilidad obtuvo una rentabilidad en 2017 del 6,2% y alcanzó un patrimonio de 86,3 millones de euros.
Se trata de un fondo de renta variable global que invierte en valores de renta variable incluidos en los principales índices de responsabilidad social y medioambiental. El universo de inversión lo forman empresas que forman parte de índices de sostenibilidad o que cumplen un mínimo de requisitos de sostenibilidad. Su gestor actual es Julio Rada, pero anteriormente se encontraba bajo la batuta de Pablo Cano, que ahora ha decidido ir por libre y ha emprendido un nuevo proyecto, NAO.
Esta nueva estora, que cuenta con el apoyo financiero y moral de la Familia Serratosa, también se centrará en fondos con criterios ISR, tal y como explicó su gestor en una entrevista con Vozpópuli.
CaixaBank comenzó en el año 1999, con la comercialización del fondo MicroBank Fondo Ético, uno de los primeros fondos ISR en España. Es un fondo solidario que cede parte de la comisión de gestión a una serie de ONGs.
A este le siguió en el año 2013, el MicroBank Fondo Ecológico, que selecciona y combina los mejores fondos de renta variable del sector ecología. La decisión de crear estos productos con criterios éticos y sociales además de los financieros, vino determinada por nuestra misión de construir una sociedad mejor y más justa. En este sentido, destaca también la adhesión de la gestora a la red española del Pacto Mundial de Naciones Unidas (2011) o la firma de los Principios de Inversión Responsable de las Naciones Unidas (UNPRI) en 2016.