Los fondos de inversión y la gestión patrimonial se han convertido en el segmento estratégico de las entidades financieras para incrementar sus márgenes de beneficios. La presentación de resultados trimestrales de Bankinter ha servido para comprobar hasta qué punto los bancos están aprovechando la falta de incentivos para sus clientes en otros productos financieros y el crecimiento moderado en otras áreas de negocio para dar un empujón a los fondos de inversión.
Los datos son claros en Bankinter. La pata de gestión de activos ha proporcionado durante el primer trimestre del año 19,3 millones de euros en comisiones, un 50,9% más respecto al mismo periodo del año anterior, y el porcentaje por comisiones más elevado que en otros segmentos. Esto ha permitido a la entidad presidida por María Dolores Dancausa ganar unos ingresos por comisiones netas globales de 70,8 millones de euros (87,5 millones netos), un 26,6% más que el primer trimestre de 2013.
El primer trimestre con Miguel Artola al frente de la gestora ha proporcionado un aumento de más del 40% en los activos bajo gestión respecto al mismo período del año anterior, situándose a cierre de marzo en 8.600 millones de euros, de los que 2.100 son de fondos de terceros.
Pero ha sido la parte de banca privada la que más satisfacciones está dando a la entidad, ya que el área dirigida por Adela Cortina ha conseguido incrementar un 30,4% el patrimonio hasta 19.300 millones de euros, con un notable incremento del número de sicav, que se ha situado a finales de marzo en 320, un 22% más que en el primer trimestre de 2013, y una espectacular subida de los contratos de gestión delegada, que han alcanzado la cifra de 1.613, un 377% más.
Bankinter se posiciona de esta forma claramente como uno de los actores más importantes en el segmento de banca privada, en un momento en que las entidades también quieren potenciar la gestión patrimonial y ganar más cuota de mercado. Habrá que estar atentos a las presentaciones de resultados del resto de firmas financieras para comprobar hasta qué punto el negocio de gestión de activos se ha convertido en un área fundamental para las entidades.
