El gasto público en España tiene dos protagonistas con nombre propio: las pensiones y el paro. La Oficina Europea de Estadística (Eurostat) publicó este martes el desembolso de los diferentes estados miembros de la UE durante el 2022, unas estadísticas que recalcan una subida de 113.000 millones de euros en la protección social, 82.000 millones de euros en servicios públicos, 43.000 millones de euros en educación y 39.000 millones de euros en salud.
A nivel nacional, tal y como hemos explicado en Vozpópuli, sanidad y educación han perdido relevancia dentro del gasto público, pasando del 7,2% y 4,6% del Producto Interior Bruto (PIB) durante el 2021, al 6,9% y 4,4% en 2022. En términos totales, las cuentas españolas ascendieron hasta los 7.893.694 millones de euros, frente a los 7.516.330 millones de euros que se gastaron durante el 2021.
La distribución del dinero público fue la siguiente: Servicios Públicos generales (6%), Defensa (1,3%), Orden público y seguridad (1,7%), Asuntos económicos (5,9%), Protección del medio ambiente (0,8%), Vivienda (1%), Salud (7,2%), Recreación, cultura y religión (1,1%), Educación (4,6%) y Protección Social (19,5%).
Una repartición donde destaca el gasto en Protección Social, que incluye gasto en pensiones y otras transferencias sociales. Al igual que en la mayoría de países vecinos, la tendencia alcista de las ayudas y pensiones se debe a los agravios provocados por los conflictos bélicos que están azotando a Oriente Medio y Europa y las secuelas de la pandemia. Una concatenación de desgracias que, como siempre, ahorca a la ciudadanía.
Los números hablan por sí solos. A nivel nacional, la tasa de paro en el año 2022 fue del 12,9%, siendo los valores más altos en desempleo los registrados en las comunidades de Ceuta (28,4%), Melilla (21,6%) y Andalucía (19,0%). La otra cara de la moneda son las pensiones. En el último mes de 2022, el escrutinio de la Seguridad Social llegó hasta las 9.994.836 pensiones contributivas, de los cuales 6.302.297 son de jubilación.
Una subida de 33.736 millones de euros en pensiones y paro
Las estadísticas de Eurostat desvelan el paradigma que se vive en España, sobre todo en lo relativo a las pensiones y subvenciones por desempleo. En el año 2017, el dinero que se destinaba a cubrir las ayudas para las personas que se encontraban en la cola del paro rondaba los 18.746 millones de euros. Un lustro después, la cuenta ha escalado hasta los 21.664. Aunque no ha sido el dato más sangrante. En el año 2020 el presupuesto llegó a los 42.336 millones de euros.
Las pensiones no se quedan atrás, incluso siendo más abultado el aumento del gasto público. En el año 2017, la Administración asignó 106.646 millones de euros para pagar a los jubilados, mientras que en 2022 el presupuesto ascendió a los 125.392 millones de euros. Solo hay que ver la gráfica para afirmar que el sistema de pensiones en España requiere cada año que pasa una mayor cantidad de presupuesto. Esto se debe a los problemas demográficos que presenta el país, con una natalidad en récords negativos y con una sociedad cada vez más envejecida.
De 125.392 millones de euros en 2017, a 159.128 millones de euros en 2022. El gasto de las pensiones y del paro se ha encarecido unos 33.736 millones de euros, es decir, que en tan solo 5 años el Gobierno se ha gastado un 26,9% más; sin embargo, el gremio de los pensionistas ha sido el factor diferenciador y el que más se ha acrecentado. Eso sí, las ayudas del SEPE no se han quedado atrás siguiendo la estela de la Seguridad Social.
¿Por qué sube el gasto en prestaciones por desempleo si baja el paro?
El 2023 siguió el camino labrado durante la última década. La economía española cerró el pasado año con 2.707.456 desempleados registrados en el SEPE. Lo había empezado con 2.908.397 a cierre del mes de enero. Unos datos positivos que esconde una cara oculta. El gasto en prestaciones por desempleo aumentó en 1.345 millones de euros en diciembre del año pasado, un 6,47% en relación con el efectuado en 2022, según los últimos datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
¿Por qué incrementa el gasto en subvenciones por desempleo si se reduce el número de beneficiarios? En primer lugar, la tasa de cobertura subió en 3,5 puntos porcentuales, desde el 68,7% de diciembre de 2022 al 72,2% de finales del pasado año. No solo eso, sino que desde el 1 de enero de 2023, la prestación volvió a tener una cuantía del 60% de la base reguladora, lo que se ha traducido en un aumento medio de 100 euros mensuales.
Más gasto público y una vida que se encarece por minutos. Las arcas del Estado siguen tapando agujeros con un margen de maniobra casi nulo, dejando en jaque a las pensiones y al paro que necesitan como el beber de dicho presupuesto para cubrir las necesidades básicas de la ciudadanía. Un quebradero de cabeza que tiene pocas salidas y que deja mal parada a la economía española, que encamina el 2024 con sombras y luces, con menor cantidad de subvenciones, pero con un gasto público al alza.
