El Gobierno ha decretado levantar las restricciones hasta ahora existentes por motivos de prevención sanitaria contra el coronavirus para la realización de obras en edificios existentes.
"Se levanta la suspensión de las actividades relacionadas con obras de intervención en edificios existentes establecida por la Orden SND/340/2020, de 12 de abril, por la que se suspenden determinadas actividades relacionadas con obras de intervención en edificios existentes en las que exista riesgo de contagio por el COVID-19 para personas no relacionadas con dicha actividad", decreta la Orden Ministerial aprobada a instancias del ministerio de Sanidad este sábado.
"Se establece la suspensión de toda clase de obra que suponga una intervención en edificios existentes, en los supuestos en los que en el inmueble en el que deban ejecutarse se hallen personas no relacionadas con la actividad de ejecución de la obra, y que, debido a su ubicación permanente o temporal, o a necesidades de circulación, y por causa de residencia, trabajo u otras, puedan tener interferencia con la actividad de ejecución de la obra, o con el movimiento de trabajadores o traslado de materiales", indicaba la orden publicada por el BOE el pasado 12 de abril.
La Orden de este sábado levanta por completo esa suspensión a priori y matiza únicamente sobre las obras de reforma que en ellas "se garantizarán en todo caso las medidas adecuadas de higiene y la distancia mínima de seguridad entre personas de dos metros", una condición general para todas las actividades económicas.
A partir de la fase 1
El referido fin de las restricciones entra desde hoy en vigor "en todas las unidades territoriales en fase 1 y posteriores".
Ahora mismo, solo parte de Castilla y León, Barcelona y Madrid están en fase 0, y se espera que entren a la fase 1 a partir del próximo lunes.
La Asociación Nacional de Distribuidores de Cerámica y Materiales de Construcción, patronal dentro del sector de la rehabilitación, había alertado, tras el anuncio del plan de desescalada, de "mucha confusión y desconcierto en el sector de la reforma, puesto que no recoge las fechas para retomar la actividad" de un sector que movió 20.000 millones en 2019 y representa el 40% de la construcción.
Tal y como informó este periódico, la disparidad de criterios sobre las restricciones alcanzó a la propia administración pública, en especial, sobre la posibilidad de usar o no zonas comunes de edificios. La Orden Ministerial de este sábado unifica criterios y se limita a exigir, sin mayor profundidad, que en las obras se "garantice" una "distancia mínima entre personas de dos metros".
