Los usuarios de las autopistas de peaje en quiebra que pasaron a ser gestionadas por el Estado verán rebajados los precios por el uso de estas carreteras, al menos hasta que el Gobierno vuelve a licitarlas. El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, aseguró que la intención del Ejecutivo es mejorar el servicio de estas vías, entre las que se encuentran las radiales de Madrid y que tengan "unos precios que sean razonables", toda vez que consideró que los cobrados hasta este momento eran abusivos.
Los planes del Gobierno pasan por volver a colocar las concesiones en el mercado, aunque la operación no se llevará a cabo hasta que no se haya realizado el cálculo de la responsabilidad patrimonial de la administración (RPA), que evaluará el coste del rescate de las concesiones.
"Por el momento, Seitssa está gestionando estas autopistas. Lo que queremos es mejorar su uso y que tengan unos precios razonables", indicó Ábalos. El ministro también se refirió a la posibilidad de que se establezca un modelo de pago por el uso de todas las autopistas de la red del Estado con el fin de asegurar su correcto mantenimiento. Ábalos precisó que el Gobierno no ha propuesto ningún modelo sino que se ha limitado a abrir un debate sobre el futuro con la creación de una subcomisión en el Congreso.
"Lo que planteamos es que la red no ha dejado de crecer, incluso en plena crisis, pero las cantidades destinadas al mantenimiento han ido a menos, en sentido inverso. El incremento de la red debe compensarse y los Presupuestos no dan de sí para hacerlo", precisó.
Preguntado por su opinión personal, el ministro apuntó que las carreteras no deben ser diferentes de otras infraestructuras como aeropuertos, puertos y ferrocarriles, que cobran al usuario por su utilización. "Pero mi opinión no importa, lo principal es tener una postura de Estado".