El Gobierno en funciones trabaja a contrarreloj para conocer el impacto de la caída del gigante de los viajes Thomas Cook en su economía. Su análisis está todavía 'muy verde', aunque ya concluyen que el sector hotelero español necesita medidas urgentes. Por ello, según detallan fuentes del sector a este medio, representantes del Ejecutivo en funciones habrían trasladado a asociaciones hoteleras y representantes autonómicos la posibilidad de otorgar ventajas fiscales a los hoteles afectados por la crisis del operador turístico británico.
Una medida que sería similar a la adoptada por el Gobierno griego, otro de los países que más sufren con la caída de Thomas Cook. El Ministerio de Finanzas griego anunció ayer que tiene la intención de eximir del pago del llamado impuesto de estadía, similar a la tasa turística española, a todos los hoteles griegos que sufrieron pérdidas por la quiebra del touroperador británico. Las primeras estimaciones del Ejecutivo de Grecia es que esta crisis puede impactar en cerca de 500 millones a su economía y, según su Ministerio de Finanzas, se necesitará de otras medidas para frenar este contratiempo.
En España, según detallan desde el sector hotelero, el Gobierno que lidera Pedro Sánchez todavía no maneja cifras concretas sobre cómo afecta la quiebra de Thomas Cook en su negocio. Este será el primer paso para poner un plan de contingencia que será necesario para frenar el golpe que recibe la primera industria española. A priori, las dos opciones que se manejan son destinar fondos para las regiones más dependientes (Islas Canarias y Baleares) y la rebaja fiscal para las empresas afectadas.
Este mismo jueves, los hoteleros españoles declaraban al diario Expansión que barajan bajar los precios para captar nuevos clientes y paliar el impacto en la ocupación y en su cuenta de resultados de la quiebra de Thomas Cook. Una reducción de los impuestos incentivaría esta bajada de precios y daría mayor flexibilidad a los empresarios para atraer a un mayor número de clientes.
Problema en funciones
Esta crisis pilla al Gobierno en funciones y con las Cortes disueltas. Con ello, la reacción que tiene el Gobierno sólo puede llegar a través de un decreto ley aprobado por situación extraordinaria. La crisis se está gestionando a través del Ministerio de Industria, pero el encargado de dar el visto bueno a este plan, que necesitará fondos o rebaja fiscal, tendría que llegar por parte del Ministerio de Hacienda.
Este viernes se debatirán en el Consejo de Ministros los primeros datos que se manejan sobre el impacto de Thomas Cook. Los representantes del sector hotelero contactados por este medio explican que todavía no se espera que el Gobierno anuncie medidas definitivas y que la elaboración del plan de contingencia continúe en las próximas semanas.
Los hoteleros reclaman también que Aena y el resto de compañías privadas afectadas también colaboren en crear un plan conjunto para limitar el efecto en España de la bancarrota de Thomas Cook. Porque destacan que, si no ponen todos de su parte, el impacto de esta crisis puede superar las primeras previsiones.