Con la compra del Banco Etcheverría entró en España. El inicio de su particular “ruta de Colón”, pero en versión inversa, como explicó entonces en la prensa venezolana. Desde América pretendía conquistar Europa. La entrada en el histórico banco gallego no fue sino el primer paso para la compra de Novagalicia, hoy Abanca. Dos adquisiciones que convierten a Juan Carlos Escotet, en uno más entre los presidentes de las cajas, en el consejo de la CECA, la patronal del sector del ahorro. Sin embargo, el venezolano se siente más banquero. De ahí, que busque su sitio entre la gran banca. El venezolano quiere un hueco en el consejo de la Asociación Española de Banca (AEB), según confirman a Vozpópuli en fuentes del sector.
El grupo gallego cuenta con presencia en la patronal bancaria, precisamente a través del Etcheverría. En diciembre del pasado ejercicio, tras la fusión del banco con las antiguas cajas, Abanca Corporación es la entidad que forma parte de la AEB. Sin embargo, el grupo dejó de tener presencia en el Consejo General de esta patronal en noviembre de 2014 con la salida de Javier Etcheverría. Desde entonces, Escotet no cuenta con ningún representante en el este organismo de gobierno de la AEB en el que están representados actualmente Santander, BBVA, Sabadell, Popular, Bankinter, Deutsche Bank, Banca March, Banco Caminos, ING, Banca Pueyo, BNP y Novo Banco. Precisamente, la filial española de la entidad lusa está pendiente de designar a su candidato tras el cese de Pedro Escudero.
Este movimiento no implicará la salida de Abanca del sindicato de las cajas debido a las ventajas que ofrece para las entidades toda la operativa de Cecabank
Escotet confía en ganar peso en la AEB en cuanto quede una vacante libre en el consejo del sindicato bancario. Así lo confirman también desde la propia Abanca. En ese caso, Escotet dejaría su sillón en el consejo de la CECA, la patronal de las cajas, en favor de otro directivo de Abanca. Este movimiento no implicará la salida de Abanca del sindicato de las cajas debido a las ventajas que ofrece para las entidades toda la operativa de Cecabank.
Precisamente, este mismo argumento esgrimen otros bancos de cajas para no dar el salto a la AEB pese a que, desde marzo de 2013, la patronal bancaria realizase un cambio en sus estatutos, bajo la presidencia de Miguel Martín, que permite la entrada de cualquier entidad que desee formar parte de la patronal bancaria, incluidas las cajas de ahorros.
Este guiño fue interpretado por muchos sectores del mundo financiero como el paso definitivo para la fusión de ambos patronales. De hecho, a lo largo de ese ejercicio CECA y AEB mantuvieron conversaciones, que finalmente no fructificaron, para unirse. Caixabank y Bankia, cuyo presidente José Ignacio Goirigolzarri también tiene más alma de banquero que de cajero, liderarán este movimiento que se encuentra estancado, entre otras cosas, porque ambas entidades tienen presencia en el conocido como G6, el verdadero senedrín en la sombra del sector financiero español.
Desde hace un par de ejercicio, ambas entidades participan en los encuentros con Santander, BBVA, Popular y Sabadell en los que se debaten los temas más importantes que vienen afectando al sector desde el rescate a las cajas. Un potente lobby al que tampoco renunciaría Escotet si pudiera formar parte de este club.
