El presidente de la Comunidad, Ángel Garrido; y la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, están a punto de llegar a un acuerdo para regular los vehículos de alquiler con conductor (VTC) como Uber o Cabify; tal y como exige el sector del taxi, según aseguran fuentes cercanas a la negociación.
A diferencia de la medida adoptada por la Generalitat de Cataluña, que pretende imponer la precontratación de sus servicios con una antelación de al menos una hora, en Madrid controlarán la competencia estableciendo una distancia mínima obligada para que el cliente pueda contratar el servicio.
Es decir, que si en el momento no hay ningún coche cerca, el usuario no podrá reservar y tendrá que recurrir a otra opción como el taxi. Previsiblemente, esta decisión se comunicará a lo largo de este viernes. Además, las mismas fuentes explican que, según el pacto alcanzado, se establecería también que el 50% de la flota de VTC descanse durante el fin de semana (sábado y domingo).